El proyecto cuprífero Cerro Amarillo vuelve a vivir. Rodolfo Suárez envió a la Legislatura de Mendoza el Informe de Impacto Ambiental en procura de conseguir la habilitación de exploración en el yacimiento a 60 km de Malargüe y 15 km de Las Leñas.
La última vez que llegó al recinto -tal como lo exige la Ley 7722, o Difonso-Cobos, que toda tarea minera debe ser avalada con el voto de las dos cámaras legislativas - fue en 2014. En aquel momento, que gobernaba el peronista Francisco Pérez, la hizo naufragar la Unión Cívica Radical (UCR). Después pasaría lo contrario, con la frustrada Ley Suárez para rehabilitar la actividad en la provincia cuyana, en 2019. Así es la relación de la política con la minería.
Fuentes muy cercanas al proyecto confiaron a CLUBminero que los nuevos dueños de Cerro Amarillo son capitales argentinos, que no provienen del negocio minero. En 2019, tras el portazo de los mendocinos a cualquier posibilidad de minerales metalíferos, la canadiense que había adquirido derechos al explorador Jorge Bengochea, devolvió el proyecto. Después de haber gastado no menos de US$ 3.000.000 en prospección aérea con lo mejor de lo mejor en
En la exploración se trata de averiguar cuánto mineral hay y establecer claramente dónde se encuentra. Pero desde el Gobierno indican que tanto en esta primera etapa y aún en caso de que se pase a la etapa de explotación, no se usará ninguno de los químicos prohibidos por la ley antiminera.
En octubre de 2014, Francisco Pérez, había enviado el expediente a la Casa de las Leyes y no pasó el análisis de las comisiones de Energía y de Ambiente del Senado. El 15 de octubre de ese año, Ricardo Villalba, por entonces titular del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (Ianigla), anunció que no estaba terminado el inventario de glaciares en las cuencas de los ríos Grande y Malargüe.
Ese dato resulta clave, porque toda actividad minera debe realizarse fuera de la zona de glaciares. Ahora, con el inventario concluido, Suárez insistirá para que la Legislatura autorice la exploración en Cerro Amarillo, una veta de cobre ubicada en Malargüe.
El envío de los antecedentes se concreta en medio del reclamo de sectores empresarios y sindicales por la zonificación minera para Malargüe, a partir de que el intendente de ese departamento, Juan Manuel Ojeda, presentó un proyecto para exceptuar su territorio de la aplicación de la ley 7722. Mientras, el Gobierno provincial apuesta por avanzar en proyectos contemplados dentro de esa Ley.
EL PROYECTO
“Es un proyecto que se lleva adelante en Malargüe. En su momento había ido a la Legislatura y hubo un problema con la Ley de Glaciares, que no estaba reglamentada y no se sabía bien dónde estaban ubicados. Hoy este proyecto está fuera de la zona de la ley, no afecta absolutamente nada, entonces es una gran oportunidad”, aseguró el mandatario provincial tras participar del Congreso Nacional de Pymes Constructoras en Maipú.
Además, explicó que “es un proyecto de cobre que va a la Legislatura, porque son los legisladores los que tienen que aprobar todos los estudios para comenzar la etapa de exploración, sin usar ninguna de las sustancias que la ley 7722 prohíbe”.
“Es una gran oportunidad de desarrollo del Sur. Si a eso le sumamos lo que ya está ocurriendo en Hierro Indio y Potasio Río Colorado, que el potasio es uno de los minerales que más se requieren en el mundo en la actualidad sobre todo en Brasil y Chile, estamos ante una gran oportunidad para generar mucha riqueza para Mendoza desde Malargüe”, confió Suárez.
Cerro Amarillo se encuentra 60 kilómetros al oeste del centro malargüino. Se trata de un yacimiento de cobre cuyo tratamiento legislativo fue obstaculizado, en 2014. porque no estaba terminado el inventario de glaciares. Finalmente quedó comprobado que no está en zona de glaciares y por eso Suárez lo retomó.
Según datos oficiales, el proyecto de Cerro Amarillo está en el sur del malargüino, a una altura promedio de 2800 metros. El dato más importante que esgrimen desde el Ejecutivo es que el proyecto se encuentra fuera de las cuencas de los ríos Atuel y Malargüe “por lo que no existe ninguna potencial afectación del agua utilizada para consumo humano o usos productivos ni en el departamento de Malargüe ni en los departamentos de San Rafael y General Alvear”.
De acuerdo con la información suministrada a Los Andes, Cerro Amarillo se encontraría sobre la misma formación geológica en la que se encuentran algunas de las principales minas de cobre de Chile, entre ellas, El teniente, que es la mayor mina subterránea del mundo.
En los despachos oficiales se sabe que el mineral de Cerro Amarillo es un pórfido de cobre (N. de la R: pórfido es un tipo de mineralización con la que se presenta el cobre en la naturaleza, generalmente por la presencia de otro mineral, en muchos casos el molibdeno, que se utiliza en la producción de aceros).
La bibliografía indica que los pórfidos son la principal fuente de cobre a nivel mundial y son parte de grandes sistemas hidrotermales que se han formado en zonas de colisión de dos placas terrestres, indican desde el Ministerio de Economía y Energía.
En general, el tamaño de depósitos de pórfidos de cobre varía de 50 a 4.500 millones de toneladas, pero a párrafo siguiente se indica que es precipitado suponer la dimensión del proyecto y “para esto se realiza campaña de exploración que tiene entre otros objetivos determinar el tamaño del mismo”.
El análisis de las muestras superficiales y la geofísica aérea y en terreno desarrollada en el proyecto muestran que los minerales que componen el proyecto son sulfuros de cobre, que no requieren proceso de tratamiento con ninguna de las sustancias químicas prohibidas por la Ley 7722, sino que requieren un proceso físico de separación por flotación, que no encuentra impedimento.
El procedimiento de flotación inicia con la extracción del mineral, que se muele y se lo somete a flotación para separarlo de la roca.
En la actualidad un proyecto de estas características, de resultar factible, puede requerir una inversión para su construcción de alrededor de 3.000 o 4.000 millones de dólares, con todo lo que esto implica en materia de generación de trabajo: más de 4.000 empleos directos durante la construcción y más de 1.000 empleos durante la explotación, según cálculos oficiales.
En la actualidad hay 250 minas de cobre en producción en 40 países; el 80% utilizan el método de flotación.
MINERÍA Y LEY
El gobernador Rodolfo Suarez habló sobre la importancia de la minería para el desarrollo de la provincia, dentro del marco sustentable de la Ley 7722, y anunció que la próxima semana el Gobierno de Mendoza enviará a la Legislatura un proyecto de ley de exploración de cobre "Cerro Amarillo" en Malargüe. La "carpeta" de este proyecto se reactivó luego de sancionada la Ley de Glaciares, y del "censo" que permitió establecer que el yacimiento se encuentra fuera de esta zona sensible.
Cerro Amarillo está en el sur del departamento de Malargüe, a 60 kilómetros al oeste del centro departamental, a una altura promedio de 2.800 metros.
Cerro Amarillo es un proyecto de exploración, que no utilizará ninguna de las sustancias químicas prohibidas por la legislación vigente. El Gobierno quiere explotar cobre, dado que los estudios previos indican que es un pórfido de cobre. Estos son la principal fuente de cobre a nivel mundial y son parte de grandes sistemas hidrotermales que se han formado en zonas de colisión de dos placas terrestres.
Tal como estiman, podría tratarse de un yacimiento importante. Se encuentra sobre la misma formación geológica en la que se hallan las principales minas de cobre de Chile, como "El teniente", la mayor mina subterránea de todo el planeta.
Se estima que la edad de formación podría ser entre 6 y 4 millones de años, por eso la mineralización superficial no se presenta oxidada.
Cuánto podría extraerse
Los especialistas hablan que "sería precipitado" suponer la dimensión del proyecto. Los depósitos de pórfidos de cobre varían de 50 a 4.500 millones de toneladas. Por eso será importante realizar "una campaña de exploración que tiene, entre otros objetivos, determinar el tamaño", precisaron.
Compatibilidad con la 7722
Según le explicaron desde el Gobierno al POST, el proyecto se encuentra fuera la cuenca del Río Atuel y de la cuenca del Río Malargüe, entonces no existe ninguna "potencial afectación" al agua utilizada para consumo humano o usos productivos de Malargüe, San Rafael y General Alvear.
"Por los análisis hechos y por sus antecedentes geológicos (composición, origen, antigüedad) se trata de un proyecto que es compatible con la Ley 7722, o sea que no usa ni usará ninguna de las sustancias prohibidas por ley para su explotación", informaron.
El proyecto, en su eventual futura etapa de explotación, tampoco encuadra en la prohibición del Artículo 1° de la Ley 7.722. Ello, porque las muestras superficiales y la geofísica aérea y en terreno desarrollada en el proyecto muestran que los minerales que componen el proyecto son sulfuros de cobre, que no requieren proceso de tratamiento con ninguna de las sustancias químicas prohibidas por la. Requieren un proceso físico de separación por flotación, que no encuentra impedimento alguno.
"La flotación es el método de separación más eficaz y con mayores aplicaciones en los yacimientos de sulfuros de cobre del mundo, método que comenzó a utilizarse desde la primera Guerra Mundial", informaron. En la actualidad, hay 250 minas de cobre en producción en 40 países; el 80% utilizan este método en minerales sulfurados, mientras el 20% restante tratan minerales oxidados.
Ley de Glaciares
Es un proyecto que ya había ingresado en la Legislatura pero que había encontrado trabas con la Ley de Glaciares, ya que en ese momento estaba sin reglamentación y no se sabía bien dónde estaban los glaciares.
"Hoy, este proyecto está fuera de la Ley de Glaciares, por esto va a la Legislatura y son los legisladores quienes deben aprobar todos los estudios para comenzar con la exploración de cobre dentro de la ley sin usar ninguna de las sustancias que la ley prohíbe", explicó Suarez.
Recién en 2018 se comprobó que no existen ni glaciares ni zonas periglaciares que puedan ser comprometidos por el proyecto minero Cerro Amarillo.
Inversión
El proyecto podría requerir cerca de 3.000 o 4.000 millones de dólares, con la generación de más de 4.000 empleos directos durante la construcción y más de 1.000 durante la explotación.
Según datos de la Secretaria de Minería de la Nación, alrededor de 80% de la inversión minera queda en el país e impacta en las economías regionales de forma inmediata.
Impacto socioeconómico
El Gobierno prevé que el impacto socioeconómico sería "considerable", teniendo en cuenta la creación de puestos de trabajo que "se encuentran entre los mejor remunerados de la Argentina".
Se traccionará cadenas de valor de la industria local como la metalmecánica, la construcción, la industria del conocimiento, comunicaciones , gastronomía, hotelería y todo tipo de servicios, diversificando la economía y haciéndola menos dependiente de fenómenos climáticos, además de los impuestos y regalías provinciales.
Vestigio de Portezuelo
Debido a que todo indica que no se realizará Portezuelo del Viento -pese a que aún el presidente Alberto Fernández no ha laudado al respecto-, existen varios puntos considerados para la reactivación de Mendoza: exportaciones, obra pública, minería, petróleo, logística, turismo y regiones productivas, industrias creativas, situación fiscal y situación laboral.
En el apartado "minería" siempre se consideró Cerro Amarillo en el marco de la 7722, al igual que Paramillos, San Jorge o Sierra Pintada.
La palabra de Suarez
"Está dentro de la ley vigente para que no haya oposición, de manera tal que esto empiece a generar riqueza y empleo, para destinarlo a la infraestructura que necesitamos para el agua", explicó Suarez sobre el círculo virtuoso que ofrece la iniciativa. El Gobernador también agregó que la Provincia "no ha bajado los brazos en ese sentido" y citó los otros proyectos que promueve el Ejecutivo mendocino en torno al potasio y al hierro.
"Tenemos entonces una gran posibilidad de desarrollo en el Sur que, si lo sumamos a lo que sucede con Hierro Indio y Potasio Río Colorado, estamos frente a una gran oportunidad para que desde Malargüe podamos generar mucha riqueza para Mendoza", explicó Suarez en la apertura del 6º Congreso Nacional de Pymes Constructoras, con la presencia de la secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, y el subsecretario de Energía Eléctrica de la Nación, Juan Luchilo.