El conflicto en el este de la República Democrática del Congo (RDC) ha provocado llamamientos a Bruselas para que revise un acuerdo con el gobierno de Ruanda destinado a asegurar el suministro de materiales críticos utilizados en teléfonos inteligentes y coches eléctricos.
El acuerdo, firmado en febrero 2024, fue aclamado por Bruselas como un paso clave para asegurar el suministro de materiales muy buscados para impulsar la llamada transición verde y digital, pero fue criticado por hacer la vista gorda ante el comercio ilícito de minerales que son saqueados por rebeldes respaldados por Ruanda en la República Democrática del Congo, como lo documenta las Naciones Unidas (ONU).
En los últimos días, los rebeldes del M23, respaldados por Ruanda, han consolidado el control de partes de la ciudad de Goma, en la provincia de Kivu del Norte, rica en minerales, al este de la República Democrática del Congo, y, según se informa, están avanzando hacia la provincia de Kivu del Sur, una importante escalada considerada una violación del derecho internacional.
La incursión se ha centrado en zonas con abundantes minas para extraer oro, coltán, estaño, tantalio y otros materiales críticos y tierras raras. Los funcionarios congoleños y de la ONU han acusado durante mucho tiempo a Ruanda de utilizar a los rebeldes del M23 para apoderarse de minas y contrabandear minerales desde el este de la República Democrática del Congo hasta sus propias cadenas de suministro.
Los críticos afirman que el acuerdo entre la UE y Ruanda está permitiendo que los "minerales de conflicto" entren en las cadenas de suministro mundiales y europeas. Se sospecha que los fondos procedentes del contrabando de minerales ayudan a financiar a los grupos armados responsables de la escalada del conflicto, con consecuencias humanitarias devastadoras para los civiles en el este de la República Democrática del Congo.
El miércoles, el ministro de Asuntos Exteriores belga, Bernard Quintin, dijo que había instado a sus homólogos europeos a tomar medidas. "Tenemos herramientas y tenemos que decidir cómo utilizarlas", dijo Quintin a los periodistas durante una visita a Marruecos.
Fuentes diplomáticas han informado a Euronews que Bélgica ha pospuesto la suspensión del acuerdo sobre minerales de la UE.
La presidenta de la delegación africana del Parlamento Europeo, Hilde Vautmans, también afirmó el jueves que el ejecutivo de la UE debe enviar un "mensaje claro" al presidente ruandés Paul Kagame suspendiendo su acuerdo hasta que "Ruanda demuestre que cesa su interferencia".
Euronews analiza lo que sabemos sobre el conflicto y la presión sobre la UE para responder.
¿Qué está pasando en el este de la República Democrática del Congo?
Las raíces del prolongado conflicto en las zonas fronterizas de la República Democrática del Congo con Ruanda se remontan al genocidio de Ruanda de 1994, cuando unas 800.000 personas, en su mayoría tutsis, fueron asesinadas por extremistas hutus.
Una insurgencia liderada por tutsis y encabezada por el actual presidente de Ruanda, Paul Kagame, puso fin al genocidio, provocando que alrededor de un millón de hutus huyeran de Ruanda a territorios de la vecina República Democrática del Congo.
La región ha sido devastada por conflictos, incluidas dos guerras consecutivas, durante los últimos 30 años y las tensiones étnicas aún están muy extendidas.
El M23 está dirigido por tutsis y afirma que está protegiendo los derechos de un grupo étnico minoritario tutsi en el Este de la República Democrática del Congo.
También sigue activo en la región un grupo armado hutu creado por antiguos líderes del genocidio ruandés, las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR). Ruanda afirma que las FDLR constituyen una amenaza para su propia seguridad y sostiene que sigue existiendo una amenaza de genocidio contra los tutsis.
Esta semana, el grupo M23 se hizo con el control de la mayor parte de la ciudad de Goma, un importante centro de transporte y comercio de la República Democrática del Congo, que se encuentra en la frontera con Ruanda. Se informó de intensos y letales enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes.
Según informes, el grupo también ha capturado otras ciudades clave consideradas esenciales para el comercio y transporte de minerales en la región.
Los expertos de la ONU dicen que hay evidencia de que las fuerzas armadas ruandesas tienen el “control de facto” de las operaciones del M23, proporcionándole entrenamiento y armas.
Aunque el presidente de Ruanda ha negado constantemente el apoyo del Estado al M23, la evidencia se ha acumulado y el jefe de las fuerzas de paz de la ONU, Jean-Pierre Lacroix, declaró esta semana que "no había duda de que había tropas ruandesas en Goma apoyando al M23".
El jueves, un portavoz del ejecutivo de la UE también dijo que el bloque estaba instando a Ruanda a "cesar el apoyo y la cooperación con el grupo armado M23".
¿Cuál es el acuerdo de la UE - Ruanda?
Bruselas y Kigali firmaron un “Memorando de Entendimiento” en febrero de 2024 para garantizar un “suministro sostenible de materias primas” para la UE, a cambio de financiación para desarrollar las cadenas de suministro de minerales y la infraestructura de Ruanda.
Es parte de Global Gateway, el plan de asociación de infraestructura de 300.000 M de euros de la UE, y está entre una serie de acuerdos similares con países ricos en minerales, incluida la República Democrática del Congo, destinados a reducir la dependencia de su rival geoestratégico China.
Más de 900 millones de euros del fondo Global Gateway se destinarán a Ruanda.
La entonces jefa de asociaciones internacionales de la UE, Jutta Urpilainen, describió el acuerdo como una garantía de “una cadena de valor sostenible, transparente y resiliente de materias primas críticas”.
El acuerdo describe a Ruanda como un “actor importante” en la extracción mundial de tantalio y productor de estaño, tungsteno, oro y niobio. También destaca el “potencial” del país para la extracción de litio (utilizado en baterías de automóviles eléctricos) y tierras raras.
"Si se observa la composición geológica de Ruanda, no es posible que extraigan lo que exportan", dijo a Euronews, Guillaume de Brier, del Servicio Internacional de Información para la Paz (IPIS), con sede en Amberes, que realiza investigaciones sobre el terreno, una afirmación que también hizo el año pasado el Departamento de Estado de Estados Unidos.
Mientras tanto, se considera que el presidente ruandés, Kagame, ha establecido relaciones cordiales con los líderes europeos y también ha promocionado a su país como socio en los esfuerzos europeos para gestionar los flujos migratorios.
En septiembre del año pasado, un funcionario alemán del gobierno saliente del canciller Olaf Scholz habría sugerido que el alojamiento desarrollado para el plan de asilo entre el Reino Unido y Ruanda podría reutilizarse para los solicitantes de asilo que llegaran a Alemania.
¿Por qué se pide que se suspenda el acuerdo sobre minerales?
Cada vez hay más pruebas que sugieren que los rebeldes respaldados por Kigali en la República Democrática del Congo están exportando minerales de manera fraudulenta a Ruanda.
Un informe de la ONU de junio de 2024 concluye que el M23 ha establecido una “administración paralela” que controla las actividades mineras y el comercio en la República Democrática del Congo, exportando al menos 150 toneladas de coltán a Ruanda.
La ONU también estima que el M23 genera alrededor de 300.000 dólares (288.000 euros) al mes en ingresos gracias a su control de un territorio minero en el este de la República Democrática del Congo.
Mientras tanto, Ruanda ha aumentado sus exportaciones de minerales de 772 millones de dólares (741 millones de euros) en 2022 a 1.100 millones de dólares (1.060 millones de euros) en 2023, y ha profundizado sus relaciones comerciales con socios globales.
El ministro de Finanzas de la República Democrática del Congo afirmó el año pasado que el país estaba perdiendo casi mil millones de dólares en oro, estaño, tantalio y tungsteno contrabandeados ilegalmente por Ruanda.
El gobierno de Kinshasa presentó recientemente denuncias penales en Francia y Bélgica contra filiales de Apple, acusando al gigante tecnológico de utilizar minerales de conflicto. El bufete de abogados que representa a la República Democrática del Congo ha afirmado que al menos nueve refinerías que suministran tantalio a Apple obtienen el material de Ruanda, mientras que la producción propia de Ruanda del material es "casi nula".
¿Cómo podría responder la UE?
Bélgica, antigua potencia colonial de la República Democrática del Congo, ha encabezado los llamamientos a favor de una respuesta firme de la UE.
A principios de este mes, un portavoz del brazo diplomático de la UE dijo que el bloque estaba "dispuesto a considerar nuevas medidas restrictivas contra los responsables de sostener el conflicto armado, la inestabilidad y la inseguridad en la RDC".
Sin embargo, hasta ahora se han rechazado los llamamientos a la reapertura del acuerdo sobre minerales. El martes, un portavoz de la Comisión Europea dijo: "La asociación que firmamos con Ruanda tiene como uno de sus principales objetivos apoyar la obtención, producción y procesamiento sostenibles y responsables de materias primas".
"El objetivo del Memorándum de Entendimiento con Ruanda es precisamente aumentar la trazabilidad, la transparencia y reforzar la lucha contra el tráfico ilegal de minerales", añadió el portavoz.
La UE también apoya a las fuerzas ruandesas desplegadas para hacer frente a la creciente insurgencia islamista en la provincia de Cabo Delgado, rica en petróleo, en el norte de Mozambique, y en noviembre pasado asignó 20 millones de euros adicionales en el marco del llamado Fondo Europeo de Paz (FPE).
Cuando se le preguntó el jueves si el supuesto apoyo de las fuerzas ruandesas al M23 podría llevar a la revocación de los fondos del EPF, un portavoz declinó hacer comentarios, pero señaló que tal decisión requeriría el apoyo unánime de todos los estados miembros de la UE.