Cobre by Mackenzie: No habrá y urgen alianzas globales
Acto de equilibrio: ¿la creciente demanda de cobre puede obstaculizar el crecimiento futuro?
Por más esfuerzos que haga Occidente para resolver la demanda de cobre, la mitad de las medidas no alcanzarán y por eso debería "abandonar la fe exclusiva en las fuerzas de mercado y crear alianzas público-privadas que compitan con el modelo estatal chino". Así de contundente es Wood Mackenzie a la hora de dar un diagnóstico sobre el desafío de la escasez del metal rojo."Se requieren inversiones directas, incentivos fiscales, fondos de coinversión y acuerdos de suministro a largo plazo", dice.
No es novedad que la demanda de cobre crece más rápido que la capacidad de suministro. Wood Mackenzie le pone cifras al problema: la demanda total de cobre crecerá 24 % hasta alcanzar 42,7 millones de toneladas anuales (Mtpa) en 2035. Las mineras occidentales se concentran en fusiones y disciplina de capital antes que en abrir nuevas minas, generando una brecha de oferta que podría agrandarse durante la próxima década.
El último informe de Wood Mac "High-wire act: Is soaring copper demand an obstacle to future growth?" de los especialistas Charles Cooper; Peter Schmitz y Natalie Biggs indaga en la demanda de cobre y en los factores disruptores de la misma.
Los principales impulsores
Explican el 40 % del crecimiento de la demanda (3 Mtpa) al 2035
+ 1. Transición energética – autos eléctricos, renovables y redes eléctricas.
+ 2. Centros de datos y la IA, que multiplican el consumo energético.
+ 3. Gasto en defensa, con un refuerzo militar europeo cercano a €800.000 millones.
+ 4. Desarrollo económico de India y el Sudeste Asiático.
A esto podrían sumarse escenarios de aceleración net-zero (+4,2 Mtpa) y mayor industrialización india y asiática (+8 Mtpa combinadas).
Sectores clave de consumo
La pregunta ya no es si la demanda crecerá, sino si los shocks ocurrirán uno a uno o todos a la vez, tensionando la oferta.
Energía y movilidad
+ La transición de combustión a conexión eléctrica requerirá 2 Mtpa adicionales para energías renovables.
+ Los vehículos eléctricos representan hoy 22 % del mercado (2025) y llegarán a 44 % en 2035.
+ Su consumo pasará de 1,7 Mtpa → 4,3 Mtpa, es decir, 10 % de crecimiento anual.
Centros de datos
+ La IA sumará 2 200 TWh de consumo eléctrico para 2035.
+ Solo la infraestructura de red elevará el uso de cobre a 1,1 Mtpa en 2030.
+ Como el cobre pesa menos del 0,5 % del costo total de un data center, su precio no frena la construcción, lo que puede disparar picos de demanda y volatilidad de precios.
Defensa
+ El aumento del gasto militar en Europa (3,5 % del PBI) añade 25 – 40 ktpa directos, pero sobre todo moderniza infraestructura industrial, elevando el consumo indirecto.
+ Japón y otras potencias seguirán esta tendencia.
Asia emergente
+ India y el Sudeste Asiático agregarán 3,3 Mtpa al 2035 (crecimiento > 7 % anual).
+ Si replican la mitad de la trayectoria china, la construcción y redes eléctricas demandarán 5,4 Mtpa adicionales.
"Hoy el ritmo de incorporación de nuevos proyectos (880 ktpa por año) es el doble del promedio de hace una década, pero sigue corto ante la demanda".
Oferta insuficiente y nuevos modelos de inversión
Para cubrir la brecha proyectada, el mercado necesitará:
+ 8 Mtpa de nueva capacidad minera, más
+ 3,5 Mtpa de cobre reciclado (scrap).
En total, unos US$ 210 mil millones en inversiones durante la década.
Hoy el ritmo de incorporación de nuevos proyectos (880 ktpa por año) es el doble del promedio de hace una década, pero sigue corto ante la demanda.
Las demoras obedecen a permisos ambientales, oposición social y trabas técnicas.
Riesgo, capital y geopolítica
Dónde se invierte
+ Las mineras occidentales prefieren jurisdicciones OCDE, percibidas como más seguras, aunque con menos oportunidades.
+ Argentina aparece como un país potencial, pero Wood Mac advierte sobre la debilidad política del gobierno de Milei.
+ El Congo (DRC) enfrenta exceso de cobalto y restricciones de exportación.
Financiación
+ Los proyectos grandes necesitan miles de millones en capital inicial.
+ Los bancos privados occidentales imponen condiciones más duras: pruebas de estrés con precios 20-30 % más bajos, mayores aportes de capital y exigencias ESG estrictas.
+ Esto desalienta inversiones en regiones inestables.
Contraparte china
+ Las empresas estatales chinas (CMOC, Exim Bank, CDB) operan con préstamos blandos y mandatos estratégicos nacionales, asumiendo riesgos más altos.
+ Gracias a ello, China domina la producción de cobre y cobalto del Congo (Sicomines, Tenke Fungurume).
Entre 2019-2025, China concentró US$ 76.000 millones de financiamiento en proyectos cupríferos, mucho más que Occidente.
Oriente avanza, Occidente retrocede
Mientras las empresas occidentales se replegan, China, Rusia y Medio Oriente expanden su influencia:
+ Uzbekistán invierte US$ 15 mil millones para producir 400 ktpa de cátodos al 2030.
+ Arabia Saudita, vía su fondo soberano, compra participaciones directas en minas globales.
Incluso cuando las occidentales avanzan, el financiamiento se vuelve complejo:
El proyecto Reko Diq (Pakistán, Barrick Gold), de US$ 8.800 millones, depende de un consorcio multilateral (IFC, EXIM US, ADB, etc.), reflejando la creciente necesidad de estructuras mixtas y más caras.
Riesgos operativos y climáticos
+ La minería subterránea (como Chuquicamata, Chile) enfrenta retrasos de hasta una década.
+ Accidentes recientes en Grasberg, Kamoa-Kakula y El Teniente exponen riesgos de seguridad.
+ Nuevas tecnologías como lixiviación de sulfuros generan dudas sobre estabilidad productiva.
+ Fenómenos climáticos (El Niño / La Niña) ya causan inundaciones y cortes; la estimación de disrupción anual sube de 5 % a 6 % del suministro mundial, es decir 250–300 kt menos cada año.
Precios e incentivos
Para estimular inversiones, el precio incentivo del cobre debería superar US$ 11 000/t (≈ US$ 5/lb), un 10 % por encima de los valores actuales. Sin precios altos sostenidos o nuevos modelos de financiamiento, la expansión necesaria es inalcanzable.
Conclusiones
El cobre es simultáneamente columna vertebral y cuello de botella de la economía verde-digital.
+ Se prevé que el consumo mundial aumente 24 % hasta 42,7 Mtpa en 2035.
+ La oferta nueva debe crecer al menos 880 ktpa por año durante diez años, con inversiones superiores a US$ 210 mil millones.
+ Sin embargo, el pipeline de proyectos se frena por baja ley de mineral, demoras en permisos, escaso financiamiento y preferencia por fusiones.
Recomendaciones implícitas de Wood Mac
+ Occidente debe abandonar la fe exclusiva en las fuerzas de mercado y crear alianzas público-privadas que compitan con el modelo estatal chino.
+ Se requieren inversiones directas, incentivos fiscales, fondos de coinversión y acuerdos de suministro a largo plazo.
+ Las iniciativas G7/UE podrían ofrecer alternativas reales a los países anfitriones.
“La mitad de las medidas no alcanzarán. Occidente debe superar su aversión al riesgo y actuar de manera concertada y estratégica.”
Wood Mac concluye que, bajo escenarios de crecimiento acelerado, la escasez estructural del cobre puede provocar precios altos prolongados, reforzando su papel como recurso estratégico y limitante del desarrollo global.