MINERÍA Por: CLUBminero14/07/2025

Bristow en Zambia y el cobre de Barrick Mining

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Mark Bristow, presidente ejecutivo de Barrick Mining Corp, reiteró la perspectiva optimista de las mineras de cobre sobre el futuro del metal en Zambia, donde la compañía está expandiendo sus operaciones. Esta visión optimista persiste a pesar de la volatilidad de los precios a corto plazo prevista debido a la inminencia de un arancel estadounidense del 50%, según expresó el presidente Donald Trump.

Bristow reafirmó en Zambia la estrategia de la compañía de acelerar la expansión de su producción de cobre, pese al impacto que tendrán los aranceles recientemente anunciados por el gobierno de Estados Unidos. Barrick, una de las mineras más grandes del mundo, considera que la demanda de este metal estratégico continuará superando con creces la oferta en la próxima década.

Desde Lusaka, la capital zambiana, Bristow reconoció que las medidas de Washington generan incertidumbre en el mercado, pero destacó que la compañía mantiene su convicción sobre la solidez estructural de la demanda global. “El precio del cobre será inestable, como todo lo demás en el mundo, y tendremos que salir de esta inestabilidad”, señaló durante un encuentro con periodistas.

El ejecutivo aseguró que, más allá de los vaivenes coyunturales, el cobre conservará un rol decisivo en la transformación económica y tecnológica. “Estamos observando una escasez de oferta y una creciente demanda, particularmente con los centros de datos, la transición hacia energías más limpias y, en general, a medida que los mercados emergentes comienzan a invertir en la industrialización, que es un gran consumidor de cobre”, detalló.

Todos estamos de acuerdo en que la demanda de cobre está superando la oferta”, subrayó Bristow, en alusión al consenso que se observa en el sector minero acerca de las perspectivas de mediano y largo plazo.

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Barrick, que es la segunda mayor productora de oro del mundo después de Newmont, ha venido incrementando su foco en el negocio cuprífero. La compañía está ejecutando un ambicioso plan de inversión de 2.000 millones de dólares para duplicar la producción anual de su mina Lumwana, ubicada en Zambia.

De acuerdo con lo previsto, Lumwana pasará de producir unas 120.000 toneladas métricas por año a 240.000 toneladas métricas en 2028. Además, se extenderá la vida útil del yacimiento hasta 2057, garantizando un horizonte de explotación de más de tres décadas.

La expansión de Lumwana representa uno de los proyectos más relevantes de la compañía en su estrategia de diversificación de activos y reducción de la dependencia del oro. Bristow sostuvo que gran parte de la industria cuprífera global solo contempla expansiones marginales y se mostró confiado en el liderazgo de Barrick.

La mayor parte de la industria del cobre actualmente solo contempla una expansión marginal”, afirmó. “Estamos muy entusiasmados de habernos comprometido a invertir antes de esta restricción”, añadió, en referencia al nuevo contexto regulatorio que impone Estados Unidos.

El cobre es un insumo indispensable para la electrificación de la economía, desde el desarrollo de redes de transmisión hasta la fabricación de baterías, sistemas de energías renovables y vehículos eléctricos. Por ello, muchas empresas mineras consideran que los fundamentos del mercado seguirán siendo sólidos en los próximos años, pese a eventuales correcciones de precios.

Mientras tanto, las miradas del sector seguirán puestas en el impacto que puedan tener los aranceles sobre el comercio internacional y las cadenas de suministro. Para Barrick, el desafío será sostener el crecimiento en medio de un escenario volátil, pero con perspectivas de demanda sin precedentes.

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LAS NUEVAS TARIFFS DE TRUMP

En un importante anuncio de política el miércoles, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró su intención de implementar un nuevo arancel sobre el cobre importado, a partir del 1 de agosto.

La decisión, enmarcada como un movimiento estratégico para impulsar la industria nacional, apunta a un sector considerado crítico para la defensa nacional, la electrónica avanzada y la próspera industria automotriz.

Esta medida reflejó el compromiso más amplio de la administración de fomentar la autosuficiencia y el crecimiento económico dentro de las industrias estadounidenses clave, con el objetivo de estimular la producción nacional y reducir la dependencia de las importaciones extranjeras para una materia prima vital.

Se espera que la imposición del arancel fomente la inversión en las instalaciones de minería y procesamiento de cobre de EE. UU., lo que podría conducir a la creación de empleos y al fortalecimiento de la cadena de suministro nacional.

Analistas escépticos sobre el impacto de los aranceles

Sin embargo, los analistas de ING Group dijeron a principios de esta semana que es poco probable que la producción de cobre en EE.UU. reciba un impulso significativo de los aranceles recientemente anunciados por Trump.