Crece en San Juan la movida anti minería en Valle Fértil
MINERÍA06 de octubre de 2023 Huarpe / CLUBminero(n.de la r.)Alrededor de la exploración minera siempre hay novedades. Esta vez, por una oposición vecinal /política en torno a un proyecto en el Este sanjuanino, a la cual le viene dando amplia cobertura el diario local Huarpe.
LA COMENTADA CRÓNICA
San Juan concedió a Minerales Camino Real, subsidiaria en Argentina de Royal Road Minerals, la exploración del proyecto Santo Domingo. En los últimos tiempos se armó una movida alrededor de esta noticia en el territorio de Cerro La Huerta, localidad de Marayes (límite entre los departamentos Valle Fértil y Caucete), Sierras Pampeanas, un área natural protegida en el este sanjuanino.
La noticia cayó como un baldazo de agua fría entre los pobladores del Valle Fértil que, rápidamente, armaron un grupo de WhatsApp y que hoy ya cuenta con más de 600 miembros. En el amplio grupo hay personas de diferentes edades, nivel sociocultural y económico.
Hay docentes y estudiantes, agentes sanitarios, médicos, geólogos, productores, comerciantes y emprendedores, artistas y artesanos, amas de casa, madres y padres, abuelas y abuelos, gente de a pie, gente del pueblo. La consigna, más que clara: "No somos antimineros, ni tampoco ambientalistas, solo defendemos el agua, la flora y la fauna. Defendemos la vida y el ambiente en todas sus formas".
"Es necesario que se entienda bien nuestra postura", dijo Daniel Burgoa, vecino de La Majadita. "No estamos en contra del progreso y desarrollo de Valle Fértil. Queremos el progreso, pero un progreso que nos incluya a todas y todos, un progreso que sea sustentable en el tiempo. Queremos que Valle Fértil se desarrolle, pero que ese desarrollo sea amigable con nuestro paisaje, con el ambiente y el cuidado del agua", manifestó.
Para los vallistas, la decisión tomada por el Gobierno provincial y municipal de avalar la exploración y explotación megaminera en las Sierras Pampeanas es una idea errada, porque no solo va a contramano de la realidad en la que se encuentra San Juan, ante la angustiante falta de agua, producto del cambio climático y calentamiento global, sino también porque viola la Constitución Nacional, las leyes de áreas naturales protegidas, las de bosques nativos, las de parques naturales y sus respectivos contenidos que dicen: “... protegemos toda esta área para facilitar la realización de estudios y actividades de investigación científica, preservar las condiciones naturales de la región regulando el desarrollo turístico e impidiendo la realización de acciones nocivas para el medio ambiente", o “... preservar la riqueza natural de las sierras del departamento y ayudar a la armónica convivencia entre los recursos silvestres del área, sus ricas flora y fauna, y la actividad productiva de sus habitantes”.
“Cuando nos enteramos de esto", contó Margarita Chávez de Elizondo, una de las abuelas de las Sierras de Chávez, "el pueblo empezó a hablar del tema y en cada familia se instaló el miedo y la preocupación. ¿Sabe por qué? Porque por más que nos quieran convencer con espejitos de colores de que esto es progreso, nosotros sabemos el peligro de contaminación que esto trae. Los vallistas sabemos dónde vivimos y más los nacidos y criados en este lugar. En nuestras sierras está la vida, están nuestros pájaros y animales, nuestros árboles y plantas, y principalmente nuestra agua, Por eso, no vamos a permitir que ninguna megaminería ponga en riesgo todo esto”.
Según publicó en su página oficial Royal Road Minerals, la empresa del Reino Unido (Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte) que está explorando las Sierras Pampeanas, “el interés en la zona es la búsqueda de oro, cobre, plata, molibdeno, plomo, zinc, galio y otros elementos de tierras raras”.