YPF JULIO 1140x140 (1)

Mamá, te presento a Fase 3. Milei Y BCRA dixit

ACTUALIDAD11/04/2025CLUBmineroCLUBminero

ALH BANNER 1200X140

ARM2025-banner-790x100px

IMG-20250423-WA0008

milei fin del cepo
Casa Rosada y pulgares. "El cepo ya fue"


El gobierno de Javier Milei reaccionó ante la coyuntura económica y financiera doméstica y externa, tras los acuerdos con el FMI, el rebrote del IPC y la tensión cambiaria. La "Fase 3", que incluye el alivio al cepo financiero para las personas físicas y jurídicas abre una nueva etapa y hay expectativa acerca de cómo reaccionarán los mercados.

EL MENSAJE PRESIDENCIAL: "Argentina será grande nuevamente"

Queridos Argentinos: tengo el agrado de dirigirme a ustedes con una noticia que muchos estábamos esperando hace mucho tiempo. Hace unas horas el Ministerio de Economía de la Nación y el Banco Central de la República Argentina han terminado de romper el último eslabón de la cadena que mantenía nuestra economía nacional atada al piso hacía ya 15 años. Desde este momento, eliminamos el cepo cambiario de la economía argentina para siempre.

Cuando les pedí el voto les dije que venía a arreglar la economía de raíz, sin atajos ni gradualismo, bajo la premisa de que una economía sana y sostenible tiene tres fundamentos: orden fiscal, orden monetario y orden cambiario. Luego de un duro primer año de trabajo, hoy podemos dar por concluido el proceso de saneamiento macroeconómico argentino habiendo traído orden a estos tres pilares fundamentales.

Por eso, me gustaría agradecerles primero por haber tenido el coraje de cambiar el rumbo de su destino como argentinos y agradecerles, aún más, por haber atravesado las turbulencias que atravesamos durante este casi año y medio que llevamos como gobierno de la forma que lo hicieron. También quiero agradecerles a aquellos actores de la dirigencia política que sí entendieron el proceso de cambio que estábamos viviendo, sin mezquindades ni condicionamientos.

Por ejemplo, aquellos 87 héroes que defendieron el superávit fiscal, defendiendo los vetos que fuimos forzados a realizar para frenar la demagogia populista de algunos otros. Sin distinción de colores políticos cada uno de los 46 millones de argentinos que habitan este suelo tuvieron que atravesar una prueba de fuego. Y hoy, con mucho orgullo, podemos mirar hacia atrás y decir que la hemos superado. Han tenido la valentía de elegir la libertad por sobre la servidumbre y así abandonaron la lenta agonía en la que estábamos sumidos hacía casi 15 años, para pasar el trago amargo de una sola vez y para siempre, sabiendo que sería definitivo.

Esto no fue por un capricho de nuestra parte, sino un paso necesario para corregir décadas de horrores económicos que nos trajeron hasta el 10 de diciembre de 2023. Así pasamos de ser el peor alumno del mundo en materia económica a hacer los deberes y pasar a ser el alumno ejemplar.

En primer lugar, aprobamos el examen fiscal: pasamos de más de 100 años de déficit fiscal crónico a ser uno de los cinco países del mundo que solo gastan lo que recaudan y ni un peso más. En segundo lugar, aprobamos el examen monetario: pasamos de ser un país con inflación descontrolada por décadas, al punto que destruimos cinco signos monetarios, a haberle puesto un tope a la cantidad de pesos emitidos, que ha hecho caer la tasa de inflación entre 10 y 25 veces, según se mire el índice de precios al consumidor o el índice de precios mayoristas, lo que nos hizo ver una apreciación del peso sin precedentes, con su consecuente caída de la pobreza. Y hoy, en tercer lugar, pudimos sacar la última espina que nos infligía un dolor profundo, nos deshicimos del cepo cambiario que era una aberración que nunca debería haber existido.

Hace algunos minutos el Fondo Monetario anunció un programa inédito para la Argentina que cumplirá un papel importante en hacer esto posible. Digo inédito porque es la primera vez en la historia que el Fondo aprueba un programa que no es para financiar la transición de una macroeconomía desordenada a una ordenada, sino para respaldar un plan económico que ya ha rendido sus frutos. Por ese voto de confianza quiero agradecerle a todo el board del Fondo Monetario Internacional y en especial a Kristalina Georgieva la presidente del organismo.

Históricamente los programas del Fondo Monetario Internacional estaban diseñados para financiar el desequilibrio fiscal ante la imposibilidad de conseguir financiamiento en el mercado de capitales. Al mismo tiempo, la corrección fiscal siempre se llevaba a cabo mediante suba de impuestos. Sin embargo, con nosotros, esto cambió. No solo pusimos las cuentas fiscales en orden en tiempo récord, sino que además casi la totalidad del ajuste recayó en el Estado y no en los argentinos de bien. Este programa, entre Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial, BID y un repo del Banco Central, asciende a 32.000 millones de dólares, de los cuales 19,600 millones serán desembolsados de modo inmediato. De esta manera, para el mes de mayo, las reservas brutas del Banco Central estarán en torno a los 50,000 millones de dólares.

Con este nivel de reservas podemos respaldar tranquilamente todos los pesos existentes de nuestra economía, brindándole más seguridad monetaria a nuestros ciudadanos. Para explicarlo, el Banco Central como cualquier agente de la economía tiene un balance patrimonial, cuya identidad contable señala que el patrimonio neto del mismo viene dado por la diferencia entre sus activos y pasivos. Los activos del Banco Central se componen de reservas internacionales y títulos públicos emitidos por el Gobierno Nacional. En cuanto al pasivo ahí encontramos la base monetaria, esto es el dinero que está en manos de los individuos y los bancos como encajes; y la deuda remunerada, las famosas Lebacs, luego Leliqs y después pases. En este sentido, cuando suben los pasivos del Banco Central, ya sea por emisión de pesos contra títulos públicos que no tienen mercado, es decir emisión espuria o por el devengamiento de intereses de los pases, el patrimonio del Banco Central se deteriora.

De este modo, en la medida que el patrimonio neto se hace cada vez más negativo, se necesita un mayor nivel de precios para licuar las deudas del Banco Central, tal que se ajuste al tamaño real de los activos del mismo. En este sentido, en la medida que el tesoro se financia colocando títulos sin valor en el Central, el nivel de precios de largo plazo es más alto y, con ello, mayor la tasa de inflación en el presente. Puesto así es muy fácil entender por qué desde la salida de la convertibilidad el precio del dólar se multiplicó por 1200 veces. En los últimos 25 años, la política vía el Banco Central, le robó a los argentinos más de 100 mil millones de dólares. Por lo tanto, ante semejante destrucción del activo, no debería sorprender el desastre inflacionario que hemos vivido en los últimos 20 años. Y, dado que el dólar es un precio más de la economía, es casi natural que se haya disparado sistemáticamente, sin encontrar techo.

El presente acuerdo lo que busca es restaurar el activo del Banco Central y con ello su patrimonio, para que de este modo la inflación sea solo un mal recuerdo del pasado. Así, el dinero que ingrese al tesoro nacional, el mismo lo usará para cancelar su deuda con el BCRA. Es más, dado que estos títulos no cotizan a paridad, la deuda bruta del tesoro caerá.

Puesto, en otros términos, en los próximos días vamos a un nivel de reservas brutas tal que se podría rescatar la base monetaria a un tipo de cambio de 650 pesos, mientras que, si tomamos la definición de base monetaria amplia, se podría hacer a 911 pesos. Es más, si utilizamos el techo de la banda presentada por el Ministro Caputo, no solo podría rescatarse toda la base monetaria amplia, sino que sobrarían cerca de 15 mil millones de dólares.

En consecuencia y retomando lo que mencionaba anteriormente, estamos finalmente aprobando el examen cambiario. Nos hubiera encantado eliminar el cepo cambiario más rápido, pero siempre les dijimos que preferíamos eliminarlo bien y definitivamente, por sobre eliminarlo rápido y que este apuro significará que la medida fuera transitoria como sucedió en el pasado. Esa fue una de las tantas verdades incómodas que le planteamos a la sociedad al principio de nuestro mandato y que supieron aceptar con determinación y paciencia. Quiero ser claro con algo: nunca jamás en los últimos 120 años tuvimos orden fiscal, orden monetario y orden cambiario a la vez. Nunca, esta es la primera vez. Por eso, no vengan a decir que ya la vieron, porque esta vez verdaderamente sí es diferente.

Siempre faltó algo, por eso cada vez que nos encaminamos a hacer las cosas bien nos terminamos quedando cortos y así nos terminamos golpeando con la realidad. Lo peor es que nos ilusionamos tantas veces que muchos argentinos se resignaron a no volver a ilusionarse. Por eso hoy se termina, hoy rompemos la rueda, la desilusión y el desencanto y comenzamos a caminar de una vez hacia adelante. Porque finalmente por primera vez en la historia la Argentina tiene una macroeconomía con todas sus asignaturas en orden.

Esta nueva realidad fiscal, monetaria y cambiaria, significa dos cosas para el país: por un lado, que de aquí en adelante no hay razón para que la Argentina tenga turbulencias autoinfligidas. Y, en segundo lugar, que también estamos en mejores condiciones que nunca para resistir turbulencias externas. Nunca la Argentina estuvo tan bien equipada en sus fundamentos económicos para resistir las tensiones de la economía global. Esto no nos vuelve impermeables, ningún país del mundo lo es. Pero significa que, en caso de que algo ocurriera, absorberemos menos daño que en cualquier otro momento de nuestra historia y nos recuperaremos a una mayor velocidad.

No hay que subestimar esta ventaja con la que otros no cuentan, porque hoy estamos siendo testigos de una transición importante en cómo funciona la economía global. No solo en Argentina la historia se está reescribiendo, sino también en Estados Unidos y en el resto de los países del mundo. Hay placas tectónicas que se están desplazando rápidamente luego de décadas de quietud. El orden internacional tal como lo conocemos después de la Segunda Guerra Mundial ha terminado y procesos de cambio como estos siempre conllevan intervalos de mucha volatilidad.

En este sentido, en un mar de volatilidad, ya no somos una balsa de madera a la deriva; somos un verdadero acorazado. Es más, frente a la posibilidad de que el shock externo se agudice, responderemos con mayor ajuste fiscal reduciendo el gasto público. Concretamente cuando estos shocks ocurren, se requiere que la economía mejore su cuenta corriente. A su vez, dado que nuestro compromiso de honrar nuestras deudas es inquebrantable, eso implica mejorar la balanza comercial. Esto es tiene que bajar la absorción doméstica.

Sin embargo, en Argentina esto se hizo siempre devaluando la moneda, castigando así a los sectores más vulnerables. En otros momentos se lo hizo subiendo impuestos para repartir la carga del ajuste. En nuestro gobierno la absorción caerá por una reducción del tamaño del Estado, de modo tal que el ajuste no impacte sobre el sector privado, el verdadero motor de la economía.

En este sentido, si bien para asegurar el déficit cero necesitamos un superávit primario del 1,3% del PBI, a la luz de los acontecimientos internacionales recientes, hemos decidido elevarlo al 1,6%. Ya eliminado el riesgo fiscal, ya eliminado el riesgo monetario y ahora también eliminando el riesgo cambiario, han quedado asentadas las bases para la estabilidad y el crecimiento sostenido para el mediano y largo plazo. De aquí en más la economía real de los argentinos mejorarán el marco de dicha estabilidad y crecerá como nunca antes.

El ahorro de 15 puntos del PBI que antes dilapidaba la política ha sido devuelto al sector privado, lo que aumentará la inversión y el consumo. Además, la normalización de la macroeconomía argentina que hoy culmina implicará necesariamente la baja del riesgo país y en consecuencia de la tasa de interés, abaratando el costo del crédito privado y produciendo también más inversión.

De hecho, el ajuste fiscal llevado a cabo nos asegurará un piso de crecimiento de largo plazo del 4,5%, a lo cual deberíamos sumarle las reformas estructurales que hemos implementado con el DNU 70/23, la Ley Bases y las desregulaciones realizadas por el Ministerio de Desregulación, que sumadas en el primer año de gestión ascienden a más de 1700 reformas estructurales. En el corto plazo, la economía seguirá creciendo por la recomposición de los stocks de las empresas, los cuales habían sido utilizados para protegerse de la inflación.

Además, la caída de la inflación ha revalorizado los salarios y las jubilaciones, mejorando el poder de compra de todos nuestros ciudadanos. A su vez volvió el crédito privado y estamos viendo un boom sostenido de créditos hipotecarios hace más de un año. Al mismo tiempo, ya estamos transitando el camino de la baja de impuestos, volviendo más competitivo a nuestro sector privado. Y como si todo esto fuera poco estamos abriéndonos al mundo como nunca antes lo hicimos. En el largo plazo creceremos aún más, porque nuestro objetivo es convertirnos en el país más libre del mundo.

Para eso seguiremos reduciendo la carga impositiva total, ya sea, por la eliminación del impuesto inflacionario o por la reducción de impuestos directos que estamos encarando de la mano del superávit fiscal.

Por último, la normalización del mercado de cambios que estamos anunciando hoy que vuelve posible la inversión directa extranjera, dado que uno solo invierte cuando sabe que podrá disponer del fruto de su inversión como quiera, será un nuevo motor de crecimiento. Esto es, durante los últimos 15 años, la política le puso un cepo a la inversión y abrió la canilla del gasto público y de la emisión monetaria. Nosotros hicimos lo contrario, le pusimos un cepo al Estado, un cepo a la emisión y hemos liberado la canilla de la iniciativa privada para que las inversiones puedan finalmente llegar a la Argentina.

Por todos estos motivos la recuperación que venimos viendo hace meses se acelerará y se transformará en un crecimiento sostenido. En estas condiciones, Argentina será el país con mayor crecimiento económico de los próximos 30 años. En vez de hablar de crecimiento a tasas chinas pronto el mundo hablará de crecer a tasas argentinas. Y a este ritmo después de algunos años Argentina será grande nuevamente.

Esto no ocurrirá de la noche a la mañana. Nada valioso en la vida funciona así, pero sí poco a poco y con la certeza de que, tanto en el frente interno como el frente externo, tenemos los deberes hechos para mitigar lo más posible cualquier tipo de volatilidad. En el mediano plazo, dados los fundamentos del programa, la inflación no tiene ningún otro destino que colapsar, porque nunca más volverá a ver emisión de peso sin respaldo. La inflación va a colapsar indefectiblemente, pese a los intentos de generar inestabilidad de quienes todavía quieren detener el cambio.

Digo todavía porque, como hemos visto durante las últimas semanas, dada la volatilidad y la incertidumbre generada por quienes esparcieron mentiras sin ningún tipo de tapujo, este mes hemos visto una interrupción en el proceso de desinflación. Lamentablemente estos son los efectos de la aberración de la ley Guzmán que nos obligó a ir al Congreso a pedir autorización para aprobar este acuerdo con el Fondo, cuando eso no ocurre en ningún país del mundo. Atados por la reserva necesaria propia de estos acuerdos, tuvimos que ver cómo durante semanas los políticos y los economistas generaron pánico e incertidumbre en la población. Sin embargo, más allá de las victorias de corto plazo que puedan obtener, la inflación no tiene otro destino más que desaparecer, porque la inflación es siempre y en todo lugar un fenómeno monetario, que se produce por un exceso en la oferta de dinero, ya sea porque aumenta la oferta, porque cae la demanda u ocurren las dos cosas a la vez.

Como nuestro programa contempla eliminar la emisión de pesos sin respaldo para siempre, la inflación argentina tarde o temprano va a desaparecer. Salvo los más grandes, la mayoría de los argentinos no ha visto nunca algo así. Todo esto significa que despejando todos los factores de riesgo que históricamente complicaron que los argentinos pudieran salir adelante, podemos empezar a aprovechar como país todas las virtudes y ventajas comparativas que sí tenemos. Todo nuestro talento, todos nuestros recursos, toda la capacidad de cooperación, el esfuerzo y la ambición de los argentinos ahora encontrará un cauce de progreso y ya no se chocará con los obstáculos de siempre.

Tenemos una diversidad de ecosistemas envidiada por prácticamente cualquier nación del mundo. Cada uno de estos biomas representa diferentes oportunidades potenciales, desde el cultivo de la soja en la llanura a la extracción del petróleo, el turismo en los lagos o la minería en las montañas. Contamos con cientos de miles de argentinos distribuidos por el mundo que dan testimonio del talento argentino ocupando cargos jerárquicos de empresas líderes, ya sea en Silicon Valley, en medio oriente o en Europa, ansiosos de volver a reconstruir el país que los vio nacer y de ver crecer a sus hijos en su tierra natal.

Contamos con capital humano de primer nivel aquí también, un capital humano que logró volverse competitivo a nivel global teniendo inflaciones mensuales que otros países no tienen en décadas. El mismo capital humano que logró sobreponerse a una de las presiones fiscales más altas del mundo. Los argentinos aprendimos a sacarle agua hasta las piedras y con todos los factores macroeconómicos en contra. Por algo somos el país con más unicornios tecnológicos per cápita de la región, aún con la menor inversión. Imagínese cómo nos puede ir con el viento a nuestro favor.

Desde hace un año contamos con el RIGI que ya nos volvía atractivo fiscalmente para inversiones de más de 200 millones de dólares, de las cuales ya aprobamos más de 12 mil millones de dólares. Ahora, sin control de capitales, ya no habrá ningún tipo de restricción cambiaria para ninguna inversión y todo este potencial podrá ser desatado y por si fuera poco contamos con una voluntad férrea de convertirnos en el país más libre del mundo.

La única conclusión que se puede sacar de todo esto es que, en los próximos años, en la Argentina será salir adelante. Convertiremos toda nuestra energía potencial contenida en energía cinética que nos llevará a ser un país pujante. Porque como dicen las sagradas escrituras: “Los últimos serán los primeros” y Argentina, luego de marchar durante décadas con los últimos, está destinada a recuperar su lugar entre los primeros.

Por eso, a todos los argentinos que trabajan, que ahorran, a los que son empleados, cuentapropistas, a los que tienen un negocio, a los que arriesgan capital e invierten y también a quienes observan desde afuera preguntándose si tiene sentido apostar por la Argentina, quiero decirles que vean nuestra gestión como un aliado, como una verdadera oportunidad. Si el sector privado es el tren que nos lleva a un mejor futuro, nuestra función es ser quienes quitan los estorbos del camino, eliminando todas las regulaciones, tasas, impuestos y aranceles que dificultan el trabajo, la inversión y la innovación.

Este tren del progreso ya está en marcha. Me animo a decir incluso que es imparable. Pero no queremos que sea un viaje para pocos, sus puertas están y seguirán abiertas y nuestra ambición es que ningún argentino se quede afuera. Hombres, mujeres, jóvenes, adultos, en Buenos Aires, en Santa Fe, en Tierra del Fuego, en todas las latitudes de la patria, creyentes y laicos, liberales, peronistas radicales, PRO, no importa el partido o credo al que adhieran. No importa a quién votaron. No importa, inclusive, si han conspirado para que este gobierno fracase. Si el país crece, a todos nos va a ir mejor. Les irá mejor a los que les guste nuestro gobierno y a los que no, también les irá mejor.

Durante demasiado tiempo la Argentina fue injustamente castigada por una larga lista de decisiones equivocadas de parte de una larga lista de políticos. Hicieron sentir chico a un país grande. E hicieron sentir impotente a un pueblo noble. Eso también se terminará. Todos los argentinos nos merecemos mucho más que eso y todos los argentinos tendremos finalmente lo que nos merecemos.

Tendremos un país en el que salir adelante sea fácil para el que hace las cosas bien, tendremos un país en el que, con esfuerzo, con trabajo o con talento le alcance a cada uno para poder perseguir su proyecto de vida. Y comenzará así una era dorada para todo aquel que quiera prosperar en el suelo argentino. Que pondrá a la Argentina nuevamente en el lugar que se merece en la economía global como un ejemplo de libertad y de prosperidad.

Todos tienen mi promesa inquebrantable de que no descansaremos ni un segundo hasta lograrlo. Tengan la tranquilidad de que todo marcha acorde al plan. Este es el futuro de la Argentina. Este es el futuro de los argentinos. Y este es el mensaje que quería traerles a todos ustedes hoy.

Que Dios bendiga a los argentinos y que las fuerzas del cielo nos acompañen. Muchas gracias.


#Docs
El anuncio del Banco Central de la República Argentina

Inicio de la Fase 3 del Programa Económico con flexibilización cambiaria y flotación entre bandas

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) inicia la Fase 3 del programa económico comenzado el 10 de diciembre de 2023. En esta nueva etapa, (i) la cotización del dólar en el Mercado Libre de Cambios (MLC) podrá fluctuar dentro de una banda móvil entre $1.000 y $1.400, cuyos límites se ampliarán a un ritmo del 1% mensual, (ii) se elimina el dólar blend, se eliminan las restricciones cambiarias a las personas humanas, se permite la distribución de utilidades a accionistas del exterior a partir de los ejercicios financieros que comienzan en 2025 y se flexibilizan los plazos para el pago de operaciones de comercio exterior, y (iii) se refuerza el ancla nominal perfeccionando el marco de política monetaria en el que no hay emisión de pesos por parte de BCRA para el financiamiento del déficit fiscal o para la remuneración de sus pasivos monetarios.

Estas medidas permitirán al BCRA seguir avanzando en su objetivo prioritario de reducir la inflación. A su vez, la eliminación de restricciones cambiarias impulsará la actividad, el empleo, la inversión y la productividad de la economía argentina, con el refuerzo de la recuperación del ahorro doméstico y el crédito al sector privado en curso. Los avances en la política económica permiten aumentar la previsibilidad monetaria, la flexibilidad cambiaria y las reservas de libre disponibilidad que respaldan el programa económico. De esta manera, y junto a la liberación del cepo cambiario y un férreo compromiso fiscal, quedan sentadas las bases para establecer un equilibrio económico duradero.

I. EL SANEAMIENTO DEL BALANCE DEL BCRA PERMITE AVANZAR EN LEVANTAR EL CEPO

La consolidación del programa económico contará con el respaldo financiero de una nueva facilidad extendida de fondos (EFF) acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por USD 20.000 millones, de los cuales USD 15.000 millones constituyen desembolsos de libre disponibilidad en 2025. Estos recursos líquidos servirán para fortalecer el balance del BCRA a través de la recompra de Letras Intransferibles por parte del Ministerio de Economía. Desembolsos adicionales acordados entre el Ministerio de Economía y otros Organismos Internacionales del orden de USD 3.500 millones complementarán esa transacción inicial.

Por su parte, el BCRA trabajará con bancos internacionales en una nueva licitación que amplíe la facilidad de repo ejecutada en enero de 2025 en un monto de hasta USD 2.000 millones.

En conjunto, estos acuerdos tienen el potencial de contribuir a un aumento de USD 20.600 millones en las reservas liquidas del BCRA durante 2025. Por último, el BCRA ha acordado una nueva extensión de 12 meses del tramo activado del swap de monedas con el Banco Central de China (PBOC) (aproximadamente USD 5.000 millones).

”imagen

II. FLEXIBILIZACIÓN DEL RÉGIMEN CAMBIARIO

(a) El BCRA operará un régimen de flotación cambiaria dentro de bandas

En virtud de la naturaleza bimonetaria de la economía argentina, caracterizada por un alto nivel de dolarización, la transición hacia una libre competencia de monedas avanza con la implementación de un régimen prudente de bandas cambiarias con rango $/U$D 1.000-1.400. Dentro de las bandas, el tipo de cambio fluctuará libremente en función de las fuerzas de la oferta y la demanda. Tanto el valor inferior como el valor superior de la banda evolucionarán en el tiempo de forma gradual y previsible: -1% y +1% por mes, respectivamente.

La experiencia comparada de economías que han adoptado un régimen de bandas cambiarias ha probado que su introducción contribuye a la eficiencia y credibilidad de los programas de estabilización, anclando las expectativas y conteniendo la volatilidad. Esta cualidad resulta particularmente virtuosa cuando las bandas cambiarias han sido operadas por bancos centrales adecuadamente capitalizados con el respaldo de una política fiscal equilibrada y monetaria previsible.

El BCRA regulará el sistema de bandas cambiarias de la siguiente manera:

 Piso de la banda ($1.000 - 1% mensual): Cada vez que el tipo de cambio opere en el MLC en el valor inferior de la banda, el BCRA procederá a comprar dólares para defender el valor en la misma y, en el proceso, acumular reservas internacionales. La emisión de pesos resultante de las compras de divisas por parte del BCRA no será esterilizada, facilitando la remonetización económica que pueda resultar de aumentos en la demanda real de dinero.

 Techo de la banda ($1.400 + 1% mensual): Cada vez que el tipo de cambio opere en el MLC en el valor superior de la banda, el BCRA procederá a vender dólares para defender el valor en la misma y, en el proceso, eliminar pasivos monetarios. Las ventas de divisas por parte del BCRA permitirán absorber rápidamente sobrantes de liquidez que pueden resultar de reducciones en la demanda real de dinero.

 Dentro de la banda: Se promoverá la flotación libre del tipo de cambio entre los límites establecidos para el régimen. El BCRA podrá considerar la compra de dólares en función de sus objetivos macroeconómicos y de acumulación de reservas internacionales (RIN), así como la venta de dólares para morigerar volatilidad inusual. En ningún caso la intervención será esterilizada.

Este calibrado cuidadoso de las bandas cambiarias por parte del BCRA, junto al amplio aporte de recursos líquidos por parte del FMI, anticipa una transición libre de disrupciones en el proceso de desinflación en curso. Resulta importante destacar que el nuevo régimen monetario-cambiario tiene la flexibilidad para sustentar la remonetización requerida por una economía en franca expansión, al mismo tiempo que facilita la eliminación rápida de excedentes de liquidez que podrían presentarse ante cambios imprevistos y significativos de la coyuntura externa.

(b) Levantamiento del cepo a los flujos, mitigando los riesgos asociados a los desequilibrios en los stocks

El Directorio del BCRA aprobó hoy la Comunicación A 8226 que establece las siguientes modificaciones al régimen de acceso al MLC:

Para las Personas Humanas: Se levanta el cepo, eliminando el límite de USD 200 de acceso al MLC, y se eliminan todas las restricciones de acceso al MLC vinculadas con asistencias gubernamentales recibidas durante la pandemia, subsidios, el empleo público y otros. Tanto las restricciones contenidas en la Comunicación A 7340 como la “restricción cruzada” dejarán de ser aplicables a personas humanas. Adicionalmente, en coordinación con el BCRA, ARCA eliminará la percepción impositiva existente a la adquisición de moneda extranjera en el MLC (permaneciendo solamente sobre el turismo y los pagos de tarjetas de crédito).

Para el pago de nuevas importaciones:

• Importaciones de bienes podrán pagarse a través del MLC a partir del registro de ingreso aduanero (previamente era 30 días)

• Importaciones de bienes por parte de empresas MiPyMEs podrán pagarse a través del MLC a partir del despacho del puerto de origen (previamente era 30 días a partir del registro de ingreso aduanero)

• Importaciones de servicios podrán pagarse a través del MLC a partir del momento de prestación del servicio (previamente era 30 días)

• Importaciones de bienes de capital podrán pagarse a través del MLC con un 30% de anticipo, 50% a partir del despacho del puerto de origen y 20% a partir del registro de ingreso aduanero (previamente era un 20% de anticipo y solamente para MiPyMEs)

• Importaciones de servicios entre empresas vinculadas podrán pagarse a través del MLC a partir de que se cumplan 90 días de la fecha de prestación del servicio (previamente era 180 días)

Complementando las flexibilizaciones mencionadas, y con el objetivo de acomodar los pagos de importaciones y deudas financieras que pudieran estar operando a través del mercado cambiario financiero (CCL), el BCRA eliminará por única vez la restricción de 90 días anteriores contenidos en la Comunicación A 7340 (la “restricción cruzada”), para permitir que las personas jurídicas puedan volver a operar en el MLC en forma eficiente.

Para las Personas Jurídicas:

En relación a los flujos

Sumándose a la autorización a acceder al MLC, sin conformidad previa, para cancelar los intereses compensatorios devengados a partir del 1° de enero de 2025, por deudas financieras con sus empresas vinculadas aprobada por el directorio del BCRA el 19 de diciembre de 2024, queda autorizado el acceso al MLC para pagos de dividendos a accionistas no residentes correspondientes a las utilidades obtenidas en los balances cuyos ejercicios comiencen a partir del 1° de enero de 2025.

En relación a los stocks

Complementando la flexibilización provista al acceso al MLC focalizada en los flujos, respecto a la potencial demanda residual para acceder al MLC vinculada a los stocks heredados de dividendos y servicios de deuda con entidades vinculadas, el BCRA está trabajando en el diseño de una nueva serie de Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre (BOPREAL). Estos títulos podrán ser adquiridos en pesos, para afrontar obligaciones con el exterior relacionados con deudas o dividendos previos al 2025, y deudas comerciales con fecha previa al 12 de diciembre de 2023.

Estas acciones serán complementadas por medidas que afectan la operación en el MLC pero que no dependen estrictamente de normativas dictadas por el BCRA:

 Se derogará el Programa de Incremento Exportador (80/20 o dólar blend) para la liquidación de exportaciones. Los plazos de ingreso de divisas al MLC por exportación de bienes y servicios no se verán modificados. Se prevé que esta simplificación del mercado cambiario spot facilitará el desarrollo y la liquidez de los mercados a término, tanto para el tipo de cambio como para las materias primas, relevantes para amplios sectores de la economía.

• Se eliminará el plazo mínimo de tenencia para operaciones de valores negociables (parking) aplicable a personas humanas (CNV RG 959/2023).

III. FORTALECIMIENTO DEL RÉGIMEN MONETARIO

(a) El BCRA fortalecerá el ancla nominal del programa, perfeccionando el esquema de agregados monetarios.

La Fase 3 del programa macroeconómico contempla establecer un régimen monetario convencional orientado al monitoreo estricto de la cantidad de dinero. La base fundamental del esquema monetario seguirá siendo la restricción de (a) cero financiamientos de la política fiscal por parte de BCRA, y (b) cero emisión por remuneración de los pasivos remunerados del BCRA.

A partir de esa premisa, el nuevo régimen monetario se caracterizará por un control más estricto y un sesgo más restrictivo que el régimen que reemplaza, que se basaba en el límite a la base monetaria amplia (BMA).

Objetivos de la programación monetaria del BCRA. Para hacer operativo el nuevo régimen, el BCRA hará pública su estimación de la programación monetaria realizada a partir de sus modelos de demanda de dinero de manera consistente con su mandato de estabilidad de precios (Art. 3 de la Carta Orgánica). En base a dichos modelos, la programación monetaria permitirá al BCRA monitorear la evolución de los agregados monetarios trimestralmente, y en particular la evolución de M2 transaccional privado . En el inicio del régimen se establecerá un horizonte definido por el año calendario 2025, consistente con el horizonte definido en el acuerdo con el FMI (ver abajo).

Este perfeccionamiento del marco monetario que utiliza los agregados monetarios como ancla nominal de la economía, le permitirá al BCRA ejercer un monitoreo aún más estricto sobre la trayectoria de la cantidad de dinero en la economía. El grado de convergencia del M2 observado (promedio del último mes de cada trimestre) con el objetivo establecido de M2 le permitirá al BCRA evaluar la oportunidad de tomar, o no, acciones que regulen la liquidez doméstica de manera de conducir adecuadamente y consolidar el proceso de desinflación .

”imagen

Metas monetarias y de reservas internacionales definidas en el acuerdo con el FMI. Este marco monetario convencional resulta compatible con el marco de monitoreo monetario trimestral contenido en el acuerdo con el FMI. Sin embargo, para el seguimiento de metas del acuerdo con el FMI se utiliza una métrica monetaria complementaria: la evolución de activos internos netos (AIN) .

Efectivamente, el programa con el FMI contiene lineamientos trimestrales para la acumulación de reservas internacionales netas (RIN) y la evolución de los AIN. Ambos se determinan a partir de la proyección trimestral de la base monetaria (BM) resultante de la programación del BCRA. Resulta importante aclarar que la meta de RIN y la evolución de los AIN están definidos en el programa como performance criteria y como meta indicativa, respectivamente.

”imagen

(b) El BCRA contará con un conjunto amplio de herramientas para regular la liquidez monetaria

El BCRA cuenta con herramientas de manejo de liquidez cuya utilización guardará consistencia con el régimen de bandas cambiarias.

 Dentro de las bandas cambiarias. Mientras el tipo de cambio oscile dentro de la banda cambiaria el BCRA podrá optar por operar en los mercados secundarios de pesos a través de operaciones de mercado abierto (utilizando para ello, su cartera de títulos del Tesoro), o modificar regulaciones referentes a coeficientes de exigencia y composición de requisitos de efectivo mínimo (encajes).

 Sobre las bandas cambiarias. En ocasiones que el tipo de cambio opere en la banda inferior o en la superior, el BCRA realizará operaciones cambiarias a través del MLC hasta donde resulte necesario. Esta operatoria no será esterilizada y producirá la remonetización o la contracción de pesos (respectivamente) que resulte necesaria para reestablecer el equilibrio monetario según lo evidencie la evolución de la demanda de dinero. En ese sentido, las compras (ventas) del BCRA en el límite inferior (superior) de la banda se interpretan como una manifestación de mayor (menor) demanda de pesos, y por lo tanto no afectarán la evaluación del objetivo monetario original.

(c) Para reforzar el ancla nominal, el BCRA ha impuesto un sesgo restrictivo a su marco monetario en el inicio del nuevo régimen

Dada la volatilidad de la coyuntura externa y la propia incertidumbre que puede afectar las transiciones de política monetaria doméstica, el BCRA ha optado, en lo inmediato, por un sesgo restrictivo a la política monetaria. Entre los factores que reflejan este sesgo se destacan:

 Objetivo de dinero más restrictivo que el escenario base de proyección. Se ha elegido el objetivo monetario (M2 transaccional privado) considerando valores correspondientes a 2 desvíos por debajo del escenario base de la proyección que surge de los modelos de demanda (ver gráfico).

”imagen

Cambio de efectivo mínimo con impacto restrictivo en la liquidez disponible. En abril comenzó a operar un cambio en el régimen de integración de efectivo mínimo (por menores deducciones por franquicias) que representa una absorción de pesos significativa, contabilizado también en el aumento de la base monetaria (ver gráfico)

”imagen

• Convergencia de la disponibilidad de fondeo bancario con relación al crédito. La mejora en las perspectivas económicas impulsa una convergencia en la liquidez inmediata del sistema bancario con relación al ritmo de sus aplicaciones al crédito bancario, tanto en el segmento de pesos como en el de dólares (ver gráfico 3).

”imagen

El gran apagon en Europa PLAY

CARÁTULAS YOUTUBE 2025 (1)

francisco play

1 (2)

1 (1)

barrick con play

Where We go Play

Detrás de la noticia PLAY

Juan Pablo Perea Play

Fiesta del poncho corto PLAY

Minería RIGI play

Vicuña Play

Méndez Pagés PLAY

Giordano Play

Que sera argentina potencia PKAY

Goldemberg PDAC

Viglione PDAC

CAEM PDAC

Benítez PDAC

Caricias en la guerra comercial PDAC

Orrego PDAC

Brisrow PDAC

Pablo Quirno PDAC

Fuloni PDAC

Karina PDAC

Cardona PDAC

Javier Rojas PDAC

Carlocchia PDAC

Scolnik PDAC

Jerez PDAC

Capmin y achilles PDAC

Michel Fending PDAC

BOSQUE 25 PLAY

190

cacciola

sampalione con play 2025

vitaller

benitez

ALVAREZ BARRICK PLAY 25

donicelli con play 25

caLO RIO TINTO 2425

ROTONDO PLAY 25

royon

ZARANDON CON PLAY 25

perezalsina

PESTAÑA CON PLAY 25

MILICIC CON PLAY 2025

huidobro 25 play

MEDING 25 PLAY

fulloni 2425

viglione

ROSITANO PETERSEN PLAY 2025

BAGLIETTO CON PLAY 25

VERONICA NOHARA 2425

SASSARINI PLAY 25

PONTE 25 PLAY

saidon 2425

gimenez zapiola play 25

diego cons con play

KOKOGIAN 25 PLAY

hugo bohm 25 con play

lencina 25 play

davila

bosque

jime y fierro pla 25

JAVI ROJAS CON PLAY 25

RIVAS METSO PLAY 25

pensado con play camem

russo capemisa 25 play

FIDELEFF 25 PLAY

CAPUTO JR HG PLAY

martinez 25 play

JUAN PABLO DELGADO CASEMI SAN JUAN CON PLAY 25

200 podcasts play

Viglione

Campos

no tenemos miedo

Carlos Diaz play

Marcos lima

Cacciola_play

gustavo fernández play

Daniel jerez play

candela corredera play

SEPARADORES + PORTADAS YT (36)

Rolando Davila

QUIERO-RECIBIR-CLUBminero

roxana fernández

SEPARADORES + PORTADAS YT (8)

Sonia delgado

Facundo Huidogro

Leonardo Viglione (1)


motosierra

carajo con play

Daniel Bosque Enviado a Toronto

QUIERO RECIBIR CLUBminero

Julio Fonrouge 2_play

Castro Salas - Guillermo Juárez (1)

Sola_gasoducto_portada

Hugo caranza_play