ACTUALIDAD CLUBminero 12 de diciembre de 2022

Día del Petróleo: Los mensajes de Royón y el IAPG

La secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, prometió una balanza energética superavitaria de US$ 4.000/8.000MM en 2026 además de lo que genere el GH2, al destacar los efectos de los planes Gas.AR 4 y 5 y el gasoducto GNK, entre otras transformaciones argentinas (ver discurso).

Por su parte, Ernesto López Anadón, presidente del Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG), destacó que hoy el sector genera 150.000 empleos directos y 750.000 indirectos y que precisa para competir mejor con el mundo libertad de exportación, infraestructura necesaria y libre disponibilidad de divisas (ver discurso).

La funcionaria y el dirigente empresarial hablaron durante la celebración, anticipada en un día, del Día del Petróleo en el tradicional almuerzo celebrado en Buenos Aires. 

13-D: EL SALUDO DE CLUBminero

EL DISCURSO DE FLAVIA ROYÓN


Buenos días. Es para mí un gran gusto estar hoy aquí con ustedes en una nueva celebración del día del petróleo y del gas. Más aún, en este 12 de diciembre, cuando se cumplen exactamente 4 meses desde que el Ministro, Sergio Massa, me confiara la inmensa responsabilidad de estar al frente de la Secretaría de Energía.

Quiero agradecer especialmente por la invitación al Instituto Argentino del Petróleo y del Gas. Asimismo, vaya mi reconocimiento por organizar esta celebración a la Cámara de la Industria del Petróleo, a la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos, a la Asociación de Distribuidoras de Gas de la República Argentina, a la Cámara de Empresas de Operaciones Petroleras Especiales, a la Cámara Argentina de Energía, a la Cámara de Empresas Argentinas de Gas Licuado, al Club del Petróleo de Buenos Aires y a la Sección argentina de la Sociedad de Ingenieros en Petróleo. 

A todos, quiero expresarles mi sincera gratitud por acompañar a esta Secretaría en el desafío de proveer a nuestro país de energía asequible, segura, sostenible y moderna. Y cuando digo acompañar, lo hago desde la profunda convicción de que el camino del desarrollo sólo puede ser recorrido si aprovechamos al máximo el vínculo virtuoso que se genera cuando el Estado, las empresas y los trabajadores del sector dirigen sus esfuerzos de forma mancomunada. 

No hay política energética sustentable y con mirada de largo plazo posible, sin la necesaria asociación estratégica de los sectores público y privado. Por ello, insisto en reconocer la labor de todos y cada uno de ustedes en el desarrollo de este nuevo vector, que nos permite integrarnos a la naciente cadena global, con valor agregado local y con generación de fuentes de trabajo genuinas y sostenibles.

Mañana se cumplen 115 años desde que se descubrió petróleo y gas en Comodoro Rivadavia, un desarrollo donde confluyó el capital privado, el Estado, los científicos y que permite hoy mejorar las condiciones de vida de generaciones de argentinos. En efecto, los hidrocarburos han transformado a tal punto nuestras vidas que, a veces, olvidamos que son lo que permiten que vivamos en la forma en que lo hacemos: desde cómo nos trasladamos, hasta cómo influye en la producción mundial de alimentos y en el traslado de todas las mercancías que consumimos a diario, como también, en la industria química sobre la que se basa nuestra civilización (fertilizantes, detergentes, productos farmacéuticos, zapatos ropa etc). 

Sin embargo, si el siglo pasado fue el del petróleo; este nos enfrenta al desafío del cuidado del ambiente y de la transición hacia energías de menores emisiones de carbono. Estamos convencidos, junto al Ministro Massa, que la matriz energética de la Nación debe estar diseñada en función de sus propios intereses y objetivos, en base al desarrollo endógeno de tecnología para el aprovechamiento diversificado de las distintas fuentes disponibles. 

Acaba de terminar la COP27 donde se planteó el reconocimiento de ayuda financiera a los países más vulnerables, quienes más sufren los efectos del cambio climático y quienes menores emisiones generan. Argentina debe hacer su transición energética en base a sus capacidades en un proceso justo y socialmente sostenible.

Por ello, buscamos abastecernos utilizando la abundancia de recursos energéticos disponibles. Estamos trabajando en distintos espacios de integración energética regional para contribuir con la seguridad energética de nuestros pueblos, y avanzar en las oportunidades que el mundo demanda en términos de la exportación de nuestro futuro superávit energético. La región y el mundo.

Todos celebramos que nuestro país esté en camino de lograr el tan ansiado autoabastecimiento energético, y luego el fortalecimiento de nuestras exportaciones. Sabemos que lo lograremos mediante la utilización plena de los recursos más abundantes, disponibles y valiosos, de las cuencas onshore y offshore. 

Estamos en un momento histórico. Verdaderamente, ante oportunidades que constituyen un punto de inflexión en la trayectoria del desarrollo inclusivo de la Nación. La energía, los alimentos, los minerales y la economía del conocimiento definen una nueva matriz económica capaz de transformar, una vez más, nuestra historia. 

Cuando planificamos la matriz energética, lo que definimos es qué tipo de energía estamos consumiendo, pero además qué tipo de crecimiento queremos para nuestro pueblo. Necesitamos priorizar el crecimiento económico como instrumento de generación de riqueza y encauzarlo para que se refleje en mejores condiciones de vida para todos. 

Por ello insisto: es tiempo de encuentro, de construcción plural y de trabajo conjunto. Diálogo y acción. Consenso y trabajo. Esas son las premisas que, desde el primer momento, orientan la gestión del Ministro Massa y de todo nuestro equipo. En estos 120 días, hemos trabajado en corregir cuestiones urgentes, que no podían esperar más, pero también miramos más allá, pensamos y adoptamos medidas estructurales para mejorar las perspectivas de desarrollo de nuestro país. La Argentina de hoy nos exige a todos los dirigentes que estemos a la altura de este proceso. 

Este sector puede en el mediano plazo pasar de una balanza negativa de 5.522 MMU$S, a un saldo positivo entre 4 mil y 8 mil millones de dólares en el 2026. Y a esto podremos sumarle el desarrollo de nuevas tecnologías como el Hidrogeno. Y también aspiramos a que estos sectores desarrollen, como ya lo han hecho, proveedores locales, empresas de servicios, empresas relacionadas con la economía del conocimiento con potencial exportador. 

En términos de empleo, este sector emplea a casi 100 mil personas, y a julio de este año llevaba creados 3500 puestos de trabajo con 13 meses de crecimiento ininterrumpido. Puestos de trabajo de calidad, con una remuneración superior al promedio, con especialización.

En estos primeros cuatro meses dimos comienzo a la construcción del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner. Es una obra fundamental e histórica, que permitirá incrementar la producción de Vaca Muerta, ampliar la capacidad de transporte de gas en un 30%, hacerlo llegar a los centros de consumo y profundizar la posibilidad de exportación a partir de los excedentes de gas natural. Como ustedes saben, el primer tramo (desde Tratayén hasta Salliqueló), culminará en junio de 2023 y significará un ahorro de USD 2.200 millones en importaciones y subsidios. 

En cuanto al segundo tramo del Gasoducto Néstor Kirchner, hemos conseguido el financiamiento por U$S 689 millones del Banco Nacional de Desarrollo de Brasil (BNDES) y de U$S 540 millones de la CAF. Esta obra será clave para lograr el autoabastecimiento energético, profundizar las exportaciones regionales y desarrollar proyectos de GNL. Los cálculos más conservadores nos permiten proyectar un ahorro U$S 20 millones por día, con lo que la inversión se podrá recuperar en un año.

Con una inversión de U$S 750 millones, las obras de Oleoductos del Valle permitirán la duplicación de la capacidad de transporte de petróleo desde Vaca Muerta, permitiendo incrementar las exportaciones de petróleo, con lo que la Argentina se asegurará un ingreso anual de entre U$S 4.000 y 6.500 millones.

Prevemos la puesta en marcha del Oleoducto Nor Andino, en marzo de 2023, lo que nos permitirá la exportación del crudo desde los puertos chilenos. En este momento, estamos implementando métodos de inspección “In-Line Inspection (ILI), para evaluar la integridad de las cañerías que están sin operar desde 2006

El acuerdo YPF- Petronas, por el que se avanzaron en estudios para una inversión de U$S 10 mil millones en la construcción de una planta productora de GNL en Bahía Blanca, nos permitirá consolidarnos como uno de los principales países exportadores de gas del mundo. Este proyecto marcará un hito para nuestra soberanía energética. Hoy, necesitamos importar 35 barcos de GNL por año. Cuando esta planta esté en su capacidad máxima, podremos exportar 460 barcos anuales. Un cambio trascendental en nuestra balanza energética.

El proyecto Fénix - que implica una inversión de U$S 700 millones -, alcanzará una producción de unos 10 millones de metros cúbicos de gas al día. Ubicado a 60 km de Tierra del Fuego, esperamos el primer gas para principios de 2025.

Hemos realizado el Plan GAS.AR 4 y 5, con un horizonte hasta el 2028, constituyendo una verdadera política de estado al respecto, con la que buscamos dar las certidumbres para que puedan avanzar las inversiones, con una mirada federal donde están contempladas todas las cuencas del país. Es nuestro objetivo generar más producción para el autoabastecimiento y la exportación, y consolidar exportaciones a Chile y Brasil. Se estima que la extensión del Plan Gas.Ar permitirá un ahorro de divisas de alrededor de 27.000 MMUSD, al tiempo que generará ahorros de subsidios por más de 18.000 MMUSD para el periodo 2023-2028.

También estamos comprometidos con la exploración offshore. ¿Y por qué estamos convencidos del offshore? Porque puede significar otro Vaca Muerta para nuestro país, exportaciones por U$S 7 mil millones, una actividad que nuestro país realiza desde hace 90 años sin incidentes y hoy aporta el 15% de nuestro gas, donde se genera empleo y desarrollo, y particularmente ahora puede cambiar la realidad de Mar del Plata, la ciudad con más desempleo de nuestro país. Esto es el offshore: inversiones, exportaciones, trabajo de calidad, desarrollo de proveedores de bienes y servicios, desarrollo de infraestructura local. En este sentido quiero resaltar la aprobación del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación para llevar adelante el Proyecto Argerich, cumpliendo las medidas de seguridad y prevención establecidas en el Plan de Gestión Ambiental. Se trata de un pozo exploratorio, que se realizará a 300 km de la costa de Mar del Plata, donde se presume la existencia de un yacimiento con capacidad de producir casi el 40% del petróleo que hoy produce Argentina. 

Hemos alcanzado importantes récords en la producción de petróleo y gas. En agosto de este año, la producción de gas no convencional fue la más alta de nuestra historia, representando el 56% del total. En tanto, en octubre, la producción de shale oil representó un incremento interanual del 40%, mientras que la de petróleo fue la más alta desde 2009, alcanzando 619 mil barriles por día. 

Hemos avanzado con el próximo otorgamiento de la prórroga de la terminal de Puerto Rosales (concesionada a Oiltanking). Con una inversión anunciada de US$ 311 millones, permitirá duplicar la capacidad de almacenamiento para exportación y para el abastecimiento de las refinerías de La Plata y Campana.

Por último, quiero destacar el plan de Tarifas Justas y Responsables, que ya hemos implementado: una readecuación de subsidios, que tiene como objetivo generar un importante ahorro fiscal para ordenar las cuentas públicas, garantizando que los sectores de menos ingresos continúen teniendo el acompañamiento del Estado. Al día de hoy ya estamos transitando por la segunda etapa de quita de subsidios a aquellos sectores que pueden afrontarlo, y nos encontramos trabajando en los esquemas de traslado de costos de la energía a los usuarios como así también en las tarifas de transporte y distribución para el 2023.
Este gobierno tiene una hoja de ruta impulsada por el ministro Massa para llevar previsibilidad a las familias argentinas y consolidar el sendero de reducción de la expectativa inflacionaria y el orden económico que precisa nuestro país.

En las próximas semanas también avanzaremos junto con las provincias en el plan de ahorro y eficiencia energética así como también en el de transición energética. La sustentabilidad de nuestro sistema tiene que estar basado en la seguridad energética, el costo, nuestro desarrollo tecno industrial y con un horizonte de des carbonización. 

Aspiramos a que las energías renovables sigan incorporándose con estos objetivos, en esta línea también hemos concluido el master plan de transporte eléctrico con todas las provincias y estamos trabajando en búsqueda de financiamiento internacional

También ya estamos por concluir el proyecto de ley de GNL e Hidrogeno 

Dicho todo esto, me gustaría que podamos reflexionar sobre la participación de las mujeres en el sector energético. Como en la gran mayoría de los ámbitos productivos, existe en nuestro sector una igualdad formal y una desigualdad real. Se han producido avances, debo reconocerlo, pero la participación actual de las mujeres sigue siendo realmente baja: oscila entre el 14 y el 15 %. En las empresas Pymes o en aquellas vinculadas a las energías renovables, las mujeres logran un porcentaje mayor de inserción, pero en las empresas energéticas de mayor escala la problemática de la desigualdad de oportunidades es más visible. Debemos seguir trabajando juntos para corregir estas asimetrías. No voy a cesar en los esfuerzos: necesitamos más mujeres para el desarrollo argentino.  

No quiero terminar estas palabras sin referirme unos minutos a la cuestión de la Transición Energética. El gobierno argentino asumió el compromiso de enfocar el proceso de transición energética como vector de las políticas públicas para el sector y el desarrollo económico del país en el marco de un proceso de transición justa. Es decir, una transición que asegure la adquisición de energía limpia, asequible y sostenible, para dar respuesta a la problemática medioambiental de nuestra casa común.

Creo firmemente que la transición energética favorecerá la inversión y el desarrollo de encadenamientos productivos nacionales para alcanzar una matriz energética inclusiva, estable, soberana, dinámica, federal y sostenible. Y esto debe hacerse entre todos los actores involucrados: el Estado, definiendo reglas claras para el funcionamiento del sector y realizando los controles necesarios, y el sector privado, invirtiendo y trabajando, para juntos alcanzar el bienestar de nuestros compatriotas. Argentina tienen una gran oportunidad con la transición energética: nuestro gas, las reservas de litio, y nuestro sector nuclear. 

Los desafíos y las oportunidades están a la vista de todos. Tengo la convicción de que, con una hoja de ruta clara, pondremos a la Argentina en una senda de desarrollo sostenible, federal y dinámico. Para ello, es necesario forjar consensos básicos y promover acuerdos estratégicos que favorezcan el bienestar de todos los argentinos. Ese es nuestro compromiso y en esa dirección estamos avanzando.

¡Muy feliz día del Petróleo y el Gas para todos! 

EL DISCURSO COMPLETO DE ERNESTO LÓPEZ ANADÓN

El petróleo en Argentina es centenario. De hecho, este año YPF cumple sus primeros 100 años. Tenemos presentes también otras compañías longevas. A lo largo de los muchos años que llevamos aquí, la industria, al igual que otras actividades humanas, se ha ido transformando en la búsqueda de la sustentabilidad de las operaciones, en un marco de una población creciente. Hoy superamos los 8.000 millones de habitantes! De manera individual y colectiva las empresas se han ido adaptando a los nuevos paradigmas.

Colectivamente a través del Instituto el sector ha ido incluyendo, además de temas técnicos, otros como sustentabilidad, compliance, diversidad e inclusión. Primeros a nivel mundial en establecer “La Hoja de Ruta sobre la contribución a los ODS de las Naciones Unidas”, involucrando a toda la cadena de valor de la industria. Desarrollamos fuertemente el tema de compliance, elaborando una guía de “Lineamientos para Programas de Integridad para PyMEs de la industria del petróleo y del gas” como aporte a mejorar la gobernanza del sector. Dentro de esta política de transparencia se inscribe, a través del Instituto, la participación activa de la industria de los hidrocarburos en el estándar internacional de Transparencia de las Industria Extractivas, EITI.

Y estamos haciendo mucho hincapié en políticas que permitan que la diversidad, la equidad y la inclusión formen parte en todas nuestras actividades. Quiero destacar que la Presidente de la Comisión de Diversidad, Equidad e Inclusión, Gabriela Agular, ha sido distinguida como mujer destacada en el ámbito empresarial por la Women Corporate Directors, y otra de sus integrantes, Mary Esterman, ha sido distinguida por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires por su exitosa carrera en la industria del petróleo y del gas.

Esta Comisión ha completado la línea de base del sector que nos permitirá trabajar en planes de mejoras a futuro. La podrán encontrar en nuestra web bajo el nombre de “La agenda de género en el sector de Oil & Gas en la Argentina”. Yendo a lo técnico, hemos elaborado Prácticas recomendadas tendientes a lograr sustentabilidad en el tiempo y a ayudar a mitigar el cambio climático. -Práctica para la realización de inventarios de gases de efecto invernadero en actividades de exploración y producción de hidrocarburos y de procesamiento de gas. -Recomendaciones para la reducción de quema rutinaria. -Y estamos completando una sobre Eficiencia Energética en el diseño, desde el inicio de la definición de los proyectos a ejecutar. Sin embargo, en paralelo, coexiste una gran indiferencia de los países responsables de las actuales emisiones y concentración de CO2 en la atmósfera. Me refiero a escasos 10 o 12 países que son los únicos que poseen las herramientas dentro de sus propios territorios para dar soluciones rápidas a este tema y que lamentablemente no lo hacen.

Por ello también se está poniendo un mayor énfasis en reducir las emisiones de metano y es a eso que apunta otra de nuestras Prácticas Recomendadas como la Gestión de emisiones de metano en operaciones de exploración y producción.

Hoy la Argentina, como pocos países, cuenta con una industria responsable y sustentable, que ha dado innumerables muestras de ser capaz de dar respuesta a las diversas situaciones que enfrenta. Con una eficiencia y tecnología envidiable para otros. Sostén de muchas economías regionales donde realiza sus operaciones.

Pero también generando actividad industrial y comercial en otras Provincias no petroleras. Dando empleo a lo largo de su extensa cadena a más de 150.000 personas directas, y según cifras del Ministerio de Desarrollo Productivo, generando a su vez 750.000 empleos indirectos e inducidos en las localidades donde se opera. Que a pesar de la pandemia y las actuales vicisitudes de la economía ha sabido seguir invirtiendo y aumentando la producción de hidrocarburos.

Es hoy unos de los sectores más relevantes de la economía del país. En octubre se llevó a cabo uno de los Congresos más importantes de los que organiza el Instituto. El Conexplo, con una asistencia de más de 1.000 profesionales. En este Congreso se repasó el enorme potencial de desarrollo de recursos de gas y de petróleo que tiene el país. Obviamente con Vaca Muerta a la cabeza, pero también en otras cuencas productivas como son la Cuenca Austral y la Cuenca del Golfo San Jorge. A esto se le suma la enorme expectativa que hay con el nuevo comienzo de la exploración offshore, luego de los descubrimientos en la Cuenca espejo de la nuestra en el sur de África. Cuando la tecnología del pasado no era suficiente para develar estos abundantes recursos, el país luchó bajo la bandera del autoabastecimiento.

Hoy eso es historia antigua. Los hidrocarburos se han convertido en un enorme proyecto de exportación para el país. No podemos seguir pensando en el pasado. Nuestro futuro está en un desarrollo intensivo y sin límites de estos abundantes recursos. La historia siempre nos ha mostrado como las cosas cambian, a veces a velocidades no imaginadas. Y más aún con los problemas que se han ido generando en el mundo a medida que la población crecía. El petróleo y el gas natural son hoy muy abundantes en el planeta, pero eso solo no garantiza que en el futuro se sigan utilizando masivamente como en la actualidad.

Las Conferencias de las Partes celebradas en los últimos años, la última en Egipto, han mostrado que la ventana de oportunidades que tenemos es muy estrecha. Hoy, y no mañana, es el momento de generar las condiciones adecuadas para que la industria, una vez más, desarrolle todo su potencial. Estamos en competencia con otros activos en el mundo.

Solo los más eficientes, los de menores emisiones y los que mejores condiciones tengan para su desarrollo serán los que subsistan. No se necesita mucho. -Libertad de exportación, porque la exportación tiene que ser nuestro Norte.

-Condiciones adecuadas para que las empresas del sector y no el estado, sean las que generen la infraestructura necesaria. Porque harán falta mayores inversiones para evacuar las producciones de gas y de petróleo, como plantas de tratamiento y ductos para el mercado local y para exportación a los países limítrofes, puertos y plantas de GNL. Y por qué no, dar las condiciones para generar una infraestructura que nos permita producir hidrógeno en gran escala junto con CCS. -Y, por supuesto, libre disponibilidad de divisas, porque los proyectos son de larga maduración, no salen de la noche a la mañana. Primero se deberán hacer las inversiones, mucho antes de que la producción aumente y se exporte. Esto garantizará un flujo positivo de divisas para el país. Es el momento de apostar al futuro!

Todo esto hace imprescindible una política para el sector que sea consistente y continua, junto una fuerte política externa que defienda nuestro derecho a explotar nuestros recursos para poder desarrollarnos y para poder mitigar y erradicar la pobreza que hoy tiene Argentina. Nuestro seleccionado de fútbol, tiempo atrás, se fijó un demandante objetivo a futuro. Trabajó de manera consistente y sin interrupciones para lograrlo y hoy está disputando las etapas finales de la copa de la copa Mundial de fútbol. Esperemos que esta vez también lleguemos a las instancias finales en esta competencia abierta entre activos de gas y de petróleo en el mundo.