ACTUALIDAD CLUBminero 27 de octubre de 2022

Desabastecimiento peruano: SNMPE vs. “Carta Blanca” a Petroperú

¿ESCASEZ DE GRIFOS PARA 45 DÍAS?

Perú se complicó por la falta de combustibles en diversas regiones. Ya lo denunció la Asociación de Grifos y Estaciones de Servicio (AGESP) y el gobierno decidió socorrer con US$ 1.000MM a Petroperú. Ahora la Sociedad Nacional de Minería y Petróleo (SNMPE) urgió a las autoridades a una solución de fondo.

Qué dijo SNMPE:
El desabastecimiento de combustibles que se viene registrando en el país, es una muestra más de la grave crisis que está afrontando desde hace algunos años la industria hidrocarburífera nacional, razón por la que urge tomar una serie medidas para reactivar esta importante actividad y atraer nuevas inversiones que permitan poner en valor el potencial petrolero y gasífero que tiene el Perú.

Así lo señaló la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE) tras manifestar que si bien el aporte de capital de S/. 4,000 millones a Petroperú permitirá restablecer el abastecimiento de combustibles en el territorio nacional, ello no debe significar una “carta blanca” para la administración de dicha empresa estatal.


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“Se debe garantizar la transparencia y buen gobierno de Petroperú, así como que su administración sea profesional y ajena de presiones políticas. En esa línea, resulta prioritario la reestructuración de esta empresa a fin de darle sostenibilidad administrativa y financiera que le permita cumplir sus obligaciones económicas con sus propios recursos”, subrayó la SNMPE.

Acciones prioritarias

La SNMPE afirmó que el sector hidrocarburos atraviesa una crisis que se ve reflejada en la caída de los niveles de inversión y de producción de petróleo que hoy no supera los 40 mil barriles diarios, nivel muy inferior respecto a años pasados.

“La reactivación del sector hidrocarburos es prioritaria y para ello se requiere medidas claras y urgentes que permitan recuperar esta industria”, citó el gremio empresarial al manifestar su preocupación ante el poco interés de algunas autoridades de promover una política de seguridad energética para el Perú.

En ese contexto, la SNMPE se refirió a la importancia de atraer nuevas inversiones para la exploración y explotación de hidrocarburos con el fin de atender la creciente demanda de combustibles, otorgando para ese objetivo incentivos que nos permitan competir con otras naciones.

“Es grave que en más de un año no se haya definido cuál será la situación de los siete contratos por vencer en el Noroeste; se anuncia una licitación desde inicios del 2022, pero a la fecha no se ha publicado ninguna base. Frente a esta situación, los contratistas deben hacer provisiones que implicarán reducción de inversiones, actividades y, con ello, se generan efectos negativos en la economía de esta importante región petrolera”, advirtió.

La SNMPE también indicó que se debe asegurar la sostenibilidad de las operaciones del Oleoducto Nor Peruano; gerenciar las obras comprometidas en el Plan de Cierre de Brechas de Loreto y, prevenir en forma efectiva los conflictos sociales que afectan las actividades productivas de hidrocarburos. 

El gremio expresó su preocupación por la falta de designación y/o nombramiento de autoridades claves para la industria hidrocarburífera nacional. “Desde hace más de 10 meses está acéfala la presidencia de PERUPETRO, que es la agencia promotora del sector; y encargados nuevamente el Viceministerio de Hidrocarburos y la Dirección General de Hidrocarburos del MINEM, lo que repercute de manera negativa en la toma de decisiones y planificación para el presente y futuro del sector de hidrocarburos peruano”, remarcó. 

Es importante -anotó- trabajar y tomar decisiones para la seguridad energética del país, más aún en el contexto internacional en el que nos encontramos.

Finalmente, la SNMPE invocó que desde el Estado exista un claro y decidido compromiso con el sector hidrocarburífero, promoviendo la seguridad jurídica, la predictibilidad para todos los agentes del mercado, la igualdad en el trato, y un firme impulso al gobierno corporativo que garantice la eficiencia y transparencia en la gestión de Petroperú y otras entidades.


El problema en la prensa:

Desabastecimiento de combustibles se agrava y podría prolongarse hasta 45 días
Por Juan Saldarriaga para El Comercio

La crisis del sector hidrocarburos se complica, esta vez, por el lado del downstream (distribución de combustibles). El pasado 12 de octubre, la Asociación de Grifos y Estaciones de Servicio (AGESP) alertó la existencia de un serio problema de desabastecimiento de combustibles en varias regiones del Perú.

Hoy, el gremio advierte que esta problemática ha escalado hasta convertirse en “muy seria”, al extremo de que “no hay gasolina ni diésel” en muchos grifos de Lima, el centro y el norte del país.

Sólo el Sur no tiene tantos problemas porque es abastecido por la planta de Monte Azul [contratada por Exxon Mobil]”, señala Edwin Pinedo, presidente de AGESP.

SALVAVIDAS PARA PETRO-PERÚ
Como se conoce, esta situación tiene su origen en los apuros financieros que Petro-Perú enfrenta para adquirir combustibles en el mercado internacional debido a las “malas decisiones adoptadas por el Directorio anterior”, las cuales han conducido a que la estatal pierda sus líneas de crédito, anota Erick García, ex director de hidrocarburos.

En consecuencia, va a haber un abastecimiento muy restringido en el mercado local porque el 35% (que Petro-Perú provee) está faltando”, precisa César Gutiérrez, expresidente de la petrolera pública.

Para solucionar esta crisis, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) garantizó a Petro-Perú el pasado 17 de octubre un aporte de capital de US$ 1.000MM, destinado, precisamente, a la adquisición de combustibles.

Esto, a través de un decreto de urgencia (DU) que debió haber sido expedido la semana pasada.

Este decreto de urgencia permitirá enfrentar los problemas de liquidez que tiene la empresa debido a que no se ha recuperado todavía la confianza de los bancos”, indicó a este diario una fuente del gobierno que no quiso ser identificada.

El problema es que la mentada norma estaba teniendo un parto bastante difícil.

EL DECRETO DE URGENCIA
Hasta el lunes por la noche, el Ejecutivo se encontraba abocado a recabar estos US$ 1.000MM (que no son poca cantidad) por todos los medios a su alcance, incluyendo en las cuentas del Banco de la Nación.

Urge que se emita el decreto de urgencia cuanto antes porque mientras más demore su aprobación, más tiempo estaremos en este problema de suministro y, lo que es peor, ad portas de una anunciada huelga de transportistas”, advertía ayer Erick García.

Finalmente, el Ejecutivo publicó en horas de la noche la norma que aprueba “de manera excepcional” el aporte de capital por hasta S/4.000 millones “con cargo a los saldos de libre disponibilidad de los recursos del Tesoro Público al 31 de diciembre de 2022″.


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En esa línea, el decreto de urgencia aprueba también un endeudamiento de corto plazo por hasta US$ 500MM para que la estatal efectué las importaciones de combustibles que considere necesarias con una línea de crédito que contratará con el Banco de la Nación.

Con esto el abastecimiento de combustibles está asegurado, pero no significa que de la noche a al mañana se repondrá todo”, advirtió a este diario una fuente del Ejecutivo.

En efecto, según cálculos de Erick García, la normalización del mercado de hidrocarburos demorará entre 20 a 30 días a partir de la publicación de la norma.

Gutiérrez es menos optimista. “En mi opinión podríamos estar hablando de 30 a 45 días de desabastecimiento”, estima.

El especialista explica que, después de publicada la norma, Petro-Perú tendrá que convocar una licitación internacional cuya buena pro “fácilmente podría durar tres semanas”.

Y una vez que se firma el contrato, el proveedor puede demorar 3 o 4 semanas en entregar el combustible, por eso hablo de hasta siete semanas. Ese es el tiempo que va a haber este problema”, señala.

¿Por qué la entrega del combustible demorará tantos días?

PETRO-PERÚ, IMPORTADOR NETO
La razón, explica Gutiérrez, es que Petro-Perú adquiere todo el combustible que expende en el país en las refinerías estadounidenses de Texas y Louisiana, en el Golfo de México. Un viaje que demora cerca de un mes por vía marítima.

Como se sabe, esto ocurre desde que la estatal detuvo operaciones en la refinería de Talara, donde procesaba (convertía en diésel y gasolinas) el crudo producido en el país y el importado de Ecuador.

Desde entonces (fines de 2019), la petrolera se ha convertido en una importadora neta de combustibles, circunstancia que la ha llevado a perder participación en el mercado, desde un habitual 50% hasta un 35% o 40%.

Hoy, Petro-Perú compite con Repsol, que tiene un 40% del mercado, y dos importadores estadounidenses: Valero y Exxon Mobil, los cuales se reparten el restante 25%”, precisa Gutiérrez.

De acuerdo a especialistas consultados para este artículo, Petro-Perú tendría pocas existencias de combustibles y ese poco ya se estaría terminando.

¿Qué hacer en estas circunstancias?

PROPUESTAS DE SOLUCIÓN
La esperanza de largo plazo para la petrolera estatal consiste en reanudar operaciones lo antes posible en la nueva refinería de Talara, lo que le permitiría procesar combustibles en el país, evitando el tener que importarlos desde EE.UU.

Lamentablemente, no se conoce aún a ciencia cierta cuándo ocurrirá esto. Humberto Campodónico, presidente de la estatal, informó a este diario dos meses atrás que la nueva refinería empezaría a producir combustibles este mes de octubre.

Luego, la petrolera corrigió sus estimados para fines de año. Analistas del sector especulan, sin embargo, que el inicio de operaciones demoraría hasta el primer trimestre del 2023.

En este contexto, Gutiérrez propone, como solución inmediata, que Petro-Perú ceda franjas de almacenamiento a Exxon y Valero en el Callao, para que puedan incrementar sus importaciones de combustible.

Se trata, sin embargo, de una medida que restará más participación en el mercado de combustibles a Petro-Perú, por lo que será muy difícil que se implemente”, anota.

Para evitar que situaciones como esta vuelvan a ocurrir, Erick García aconseja aprobar un mecanismo de elección de los miembros del directorio y los funcionarios de Petro-Perú, con profesionales probos y entendidos, que eviten la toma de malas decisiones futuras. Algo que está contemplado en el decreto de urgencia emitido ayer.

Del mismo modo, aconseja reforzar la institucionalidad en entidades clave, como el Ministerio de Energía y Minas (Minem), que debería estar liderando la búsqueda de soluciones para salir de esta crisis, pero que no puede hacerlo por falta de directivos técnicos calificados.

El Minem, efectivamente, no cuenta desde hace dos semanas con viceministro de hidrocarburos, director general de hidrocarburos ni director de gas natural, oficialmente nombrados, advierte García.

Mientras tanto, los empresarios de grifos se ven precisados a buscar soluciones dramáticas.

Los griferos estamos pagando precios exorbitantes a los proveedores de combustibles. Si esta situación se va a prolongar, vamos a tener que ir hasta Arequipa para comprar diésel y gasolinas”, advierte Edwin Pinedo.